El mundo conoce de la diáspora venezolana, de sus necesidades y capacidades, su jocosidad los distingue donde van. Hoy, el folklore venezolano es más popular que nunca porque a través de su música y costumbres se mantienen cerca de quienes quedaron en casa, padres, hermanos, pareja, hijos y amigos, distrayendo la nostalgia; pero, sobre todo transformando el sentimiento de ausencia en solidaridad y emprendimientos.
Es precisamente, el conocer en carne propia las carencias y necesidades de quienes hoy están fuera, o en casa, ante el temor de una pandemia que ha herido profundamente a países con sistemas de salud avanzados, y ese enorme deseo de ayudar a los demás, sin importar donde se encuentren, sumando el triste regreso desde largas distancias ,ante la barbarie xenófoba en tiempos de cuarentena, y la necesidad urgente de soluciones a la altura ante las circunstancias, donde nace la Asociación de Empresarios e Industriales Sin Fronteras, dirigida por Daniel Peña, un merideño incansable en su propósito de ayudar a brindar atención especialmente a migrantes venezolanos que buscan ayuda médica en la frontera colombo-venezolana, así como a las víctimas de la violencia en la zona.
De este propósito, Daniel Peña y la Asociación ESF crearon “La Carpa Hospital de Unidad Comunitaria de Cuidados Intensivos” dedicado a atender pacientes en estado crítico, de diferentes edades, pretendiendo alcanzar mayores estándares de calidad en atención de emergencias, en zonas donde no existen centros de atención medica de construcción tradicional, desarrollando con éxito el proyecto piloto en el sector La Parada, municipio Villa del Rosario, en el Norte de Santander, cercano al Puente Internacional Simón Bolívar y a la ciudad fronteriza de Cúcuta, en Colombia.
Y es precisamente, su característica de rápida y adaptable pero segura construcción, lo que convierte a la Carpa Hospital UCCI, en la alternativa inmediata para atender a los afectados por la pandemia del covid-19, en su rápido avance por los países latinoamericanos, cumpliendo los protocolos establecidos internacionalmente, al establecer en ellos las unidades de cuidados intensivos, con 37 camas para adultos y 32 camas pediátricas con todos los equipos correspondientes, unidad de trauma shock, banco de sangre, laboratorio, 2 quirófanos para emergencias, áreas administrativas, cocina, áreas de descanso para el personal, lockers, baños para pacientes y para personal, deposito, cava, planta de agua potabilizadora, planta de tratamiento para aguas residuales, sistema de control de desechos, drenajes, sistema de energía solar, helipuerto y tres ambulancias, facilitando la atención individualizada a cada paciente así como seguridad tanto para el paciente como para personal de salud asignado a cada unidad.
La Asociación ESF, ha puesto este proyecto a la disposición de las organizaciones internacionales responsables de coordinar la Ayuda Humanitaria a Venezuela y de las instituciones internacionales de salud, como opción inmediata para la atención aislada de pacientes víctimas de la pandemia del covid-19, estando dispuestos a trabajar conjuntamente con gobiernos y empresas privadas, para ayudar a salvar vidas, poniendo a su disposición el correo electrónico esf.fundacion@gmail.com, las cuentas en Instagram @ceballos29 @tuboriego @ramonrodriguezerpa y los teléfonos 320 259 7751 / 350834 1034 en la ciudad fronteriza de Cúcuta.