Moscú, 12 feb (EFE).- Más de la quinta parte de las especies migratorias está en peligro de extinción, según un informe de la Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS) de la ONU, que urgió medidas inmediatas para revertir la situación.
«Más de una de cada cinco (22%) de las especies incluidas en la lista de la CMS están amenazadas de extinción», alertó el organismo en su primer informe, presentado durante la inauguración de un evento de Naciones Unidas celebrado en la ciudad uzbeka de Samarcanda, dedicado a la conservación de la vida silvestre.
Además, los expertos constaron que «casi todos los peces incluidos en la lista de la CMS (97%) están amenazados de extinción».
«Si bien algunas especies migratorias incluidas en la CMS están mejorando, casi la mitad (44%) muestra una disminución de su población», alertaron los ecologistas, al constatar que «el riesgo de extinción está aumentando para las especies migratorias a nivel mundial».
Según CMS, cerca de la mitad (51 %) de la zonas identificadas como importantes para las especies migratorias «no tienen un estado de protección», y el 58% de los sitios monitoreados experimentan «niveles insostenibles de presión causada por el hombre».
«Las dos mayores amenazas (…) para todas las especies migratorias son la sobreexplotación y la pérdida de hábitat debido a la actividad humana», denunció el organismo internacional.
Constató además que «tres de cada cuatro especies (…) se ven afectadas por la pérdida, degradación y fragmentación de su hábitat, y siete de cada 10 especies (…) se ven afectadas por la sobreexplotación (incluida la captura intencional y la captura incidental)».
A ello se suman, según los expertos, «el cambio climático, la contaminación y las especies invasoras», que causan «profundos impactos en las especies migratorias».
«Las actividades humanas insostenibles están poniendo en peligro el futuro de las especies migratorias, criaturas que no sólo actúan como indicadores del cambio ambiental sino que desempeñan un papel integral en el mantenimiento del función y resiliencia de los complejos ecosistemas de nuestro planeta», declaró Inger Andersen, Directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente.
Sin embargo, señaló que «la comunidad global tiene la oportunidad de reducir las presiones que enfrentan las especies migratorias por medio de acciones de conservación concretas».
«Dada la precaria situación de muchos de estos animales, no podemos darnos el lujo de demorarnos», urgió Andersen.
La conferencia de las Naciones Unidas para la conservación de la vida silvestre (CMS COP14) que arrancó hoy en Samarcanda, es la primera celebrada en Asia Central, una región que alberga muchas especies migratorias, entre ellas el antílope saiga, el leopardo de las nieves y gran diversidad de aves migratorias.