Yanara Vivas SNTP 6961 /CNP 16770
Con las gradas hasta las banderas, el ruedo lleno de invitados especiales y pasillos externos a reventar, fue celebrada la Misa Solemne del centenario de ser elevada a Arquidiócesis Metropolitana de Mérida, la otrora Diócesis, realizada en la Plaza Monumental Román Eduardo Sandia de Mérida, bajo el ardiente sol de este domingo 11 de junio de 2023, prevaleciendo la alegría y el buen comportamiento de mas de 20 mil fieles, asistentes al encuentro centenario.
Con la participación de al menos quince obispos, entre ellos los muy queridos por los merideños y Luís Alfonso Márquez Molina, Obispo Auxiliar Emérito de Mérida, Monseñor Alfredo Enrique Torres Rondón, actual Obispo de San Fernando de Apure y Monseñor Mario Moronta, Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, junto al Clero merideño en pleno y religiosas, venidos desde cada rincón de la entidad merideña.
También estuvieron presentes el Gobernador de Mérida, Jehyson Guzmán y la Primera Dama del Estado, Gairimar Cano de Guzmán, el Alcalde de Libertador Jesús Araque, además de los alcaldes de Aricagua, Campo Elías y Zea, Legisladores, Ex Alcaldes, autoridades militares, el Rector de la Universidad de Los Andes junto al Equipo Rectoral, Bomberos y Protección Civil, colegios profesionales, entre otros.
La Misa Solemne estuvo llena de simbolismos religiosos, contando con el Santo Cristo de Aricagua y de la Virgen de la Inmaculada, patrona de Mérida, como imágenes centrales de la celebración, adornados con miles de rosas, donadas por los productores de Valle del Mocotíes, en una extraordinaria tarima en forma de cruz al frente, con pantallas gigantes, donde se proyectaron cada detalle del evento.
La lectura del Evangelio y la impecable homilía ofrecida por Monseñor Helizandro Terán, Obispo de la Arquidiócesis centenaria, coincidieron en el llamado a la paz, cordialidad y el abrazo con quienes piensen diferente, en un claro llamado a la convivencia especialmente en una Venezuela ávida de entendimientos, democracia y hermandad.
Otro momento emotivo de la Misa Solemne fueron las ofrendas, donde niños venidos de las diferentes zonas del estado, representaron a seis de los siete Obispos que han presidido la Arquidiócesis, siendo el mismo Monseñor Helizandro Terán quien, con humildad, se presentó ante el altar como séptimo Obispo de esta sede eclesiástica.
Una ceremonia donde la fe, música, la alegría, y el abrazo de un pueblo que ha puesto la esperanza por encima de las dificultades, incluso de combustible, para dar testimonio de fortaleza ante las dificultades que enfrenta La Iglesia Católica.