Márquez: falta de personal de salud y crisis eléctrica son parte del democidio en el país

El déficit de personal de salud sigue agudizándose en Táchira. Este domingo una enfermera llorando dijo que se están muriendo pacientes y que solo eran 2 enfermeros para 28 hospitalizados en el área de cuidados intermedios Covid19 del hospital central del Táchira, lo que cataloga Walter Márquez como parte del democidio (asesinato al pueblo) en Venezuela

“Las enfermeras que venían nos ayudaban y eso lo quitaron. Y ahorita se nos están muriendo adentro -llanto- estamos solo dos enfermeras. Si ustedes no hablan por sus familiares van a caer igual”, es lo que dice este domingo una profesional  de enfermería a familiares de pacientes en el hospital central de San Cristóbal, en el área  de cuidados intermedios de Covid19.

Enfermera del área de covid, dice llorando que falta personal para atender los pacientes

“Estoy corriendo con el abuelo de la señora y se me acaba de morir otra paciente… que permitan al menos esas guardias o manden una enfermera”, agrega entre llanto la enfermera, en un video que grabaron familiares de pacientes internados en el servicio Covid19 (bajar para ver ver vídeo).

De acuerdo a personal del área, solo dos enfermeras estaban este domingo de guardia para atender 28 pacientes internados en cuidados intermedios del hospital centinela de la región.

Así mismo, parte del personal del referido servicio -quienes reservan su nombre- dijeron, que tres personas habrían fallecido en las últimas horas en este servicio, por eso clamaron a incorporar más enfermeros, temen que la situación se agudice y sean los pacientes quienes lleven las peores consecuencias.

Extraoficialmente también revelaron profesionales de salud  del hospital central de San Cristóbal, que  dos pacientes  de Cuidados Intensivos de Covid19, se complicaron con el apagón prolongado ocurrido el sábado en Táchira. Dijeron que  al momento de arrancar la planta eléctrica esta no respondió por unos 20 minutos:  “al ventilador dejar de mandar porque no había electricidad se complicó una señora en la cama 5  y un señor”, afirmaron.

Por su parte, el defensor de los derechos humanos, Walter Márquez, al conocer los hechos los catalogó  como,  “democidio, asesinato de un pueblo, lo que está ocurriendo en Venezuela porque no hay una política de Estado para enfrentar esta crisis”, aseguró.

Fallas eléctricas y sin personal

Walter Márquez, defensor de los Derechos HUmanos

Márquez explicó que lo que ocurre con la asistencia a pacientes de Covid19 y con el personal de salud en Táchira, es un delito de extermino de acuerdo a lo que establece el Estatuto de Roma, que enumera las acciones consideradas crímenes de lesa humanidad.

Sobre el particular dijo el defensor de derechos humanos, que es claro que la falta de personal  de salud en el hospital tachirense pone en riesgo la vida de los pacientes, “a esto se suma la grave crisis de electricidad que amenaza constantemente estos equipos y la paralización incluso, de la Unidad de Cuidados Intensivos”.

Esclavitud y exterminio

Márquez pide a las autoridades de salud que tomen en cuenta la gravedad de lo que está pasando.

“Muchos médicos y enfermeras siguen saliendo del país porque en Venezuela ni siquiera les alcanza los ingresos económicos para sus necesidades básicas, lo que nos pone en presencia del crimen de esclavitud, tipificado en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, a lo que se  agrega el crimen de exterminio por la privación de alimentos y medicina y las condiciones precarias de vida, incluyendo los constantes apagones”.

Márquez alerta a la comunidad regional, nacional e  internacional sobre la profunda crisis humanitaria que afecta al hospital de San Cristóbal y al personal clínico médico y de enfermería.

Asegura el diputado emérito, que se está conjugando  una crisis humanitaria compleja con la pandemia de coronavirus, “por tanto, se requiere de  acciones urgentes por parte del Estado venezolano para enfrentar esta situación”.

Alertó a la comunidad internacional, nacional y regional de la profunda crisis que está afectando al hospital central de San Cristóbal, especialmente al personal médico y de enfermería.

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