La salvaguarda de Briceño Perozo fue efectiva. En su trayectoria como Director del Archivo logró incorporar los sistemas de microfilmes para copias y reproducciones, el taller de restauración de documentos, el rescate permanente de legajos deteriorados por la acción del tiempo
Elvins Humberto González
Elvins2020@hotmail.com
Siempre entre libros. Como guardián de nuestra historia, en sus más de 30 años de actividad ininterrumpida como archivista, Mario Briceño Perozo logra modernizar el Archivo General de la Nación.
En sus estantes y anaqueles, se clasificaron hasta 30 mil volúmenes encuadernados de documentos, divididos por secciones. Las tres grandes secciones recopilan legajos y documentos de la Colonia, la Independencia y la República, agrupados por expedientes.
Como archivero cuidó los documentos como a la niña de sus ojos. Solía decir que se debía tener la convicción que esos papeles eran el más preciado tesoro de la comunidad puesto por el Estado bajo nuestra custodia.
La salvaguarda de Briceño Perozo fue efectiva. En su trayectoria como Director del Archivo logró incorporar los sistemas de microfilmes para copias y reproducciones, el taller de restauración de documentos, el rescate permanente de legajos deteriorados por la acción del tiempo.
Se avanzó en cambios y modificaciones sustanciales, pero nunca estuvo satisfecho plenamente. Decía que era preciso modernizar más nuestras estructuras ir a la verdadera profesionalización del archivero. La Ley de archivos que data de 1945, resulta anacrónica y debía ser sustituida. Incluso realizó un proyecto para una nueva Ley. La misma pasó de mano en mano de muchos ministros, pero no llegó al entonces Congreso de la República.
Siembra de pasiones
Del folleto, Tópicos de Maravén, número 490 publicado en 1980 tomamos la siguiente cita de Don Mario Briceño Perozo, debido a la importancia y actualizada que aún se mantiene la misma: “La enseñanza de la cuestión histórica ha ido en desmedro, al punto de que se le ha incluido dentro del gran tema de las Ciencias Sociales. Hoy se da más geografía que historia. Es inaplazable volver a incrementar su estudio en Venezuela. Digo volver, porque los maestros de antes sembraban en uno la pasión por la materia. Hoy ha desaparecido virtualmente de la enseñanza primaria. De allí que en mayo de 1977, desde la Academia instamos al Presidente Carlos Andrés Pérez para que interviniera urgentemente para corregir a tiempo la grave fractura espiritual, intelectual y moral que se le ha ocasionado a la identidad de la nación venezolana.”
“Es preciso, urgente, retornar a la siembra de conciencias y pasiones. La historia patria, como bien se asienta en el pronunciamiento de la Academia, es el centro mismo de nuestra identidad”.
El político
Aunque este es el campo en el cual intervino por poco tiempo, es recordada su actuación frente a la gobernación del estado Trujillo hasta 1959, de la cual se encargó en enero de 1958. Como primer gobernador de la era democrática de Trujillo cabe destacar la creación de la Biblioteca Trujillana de Cultura, que se proponía divulgar la labor de nuestros escritores o extraños que está contraída a los hechos históricos trujillanos y otros temas que igual tiente se orienten a enaltecer la participación de los valores regionales en las distintas manifestaciones de la cultura nacional. Como Gobernador del estado Trujillo, realizó una labor administrativa que aún se recuerda como una de las más fecundas desde que el país recobró sus fueros democráticos. Entre sus obras en favor de su tierra natal se pueden enumerar entre otras: El Centro de Historia, Biblioteca Trujillana de Cultura, el Ateneo de Trujillo, la Iglesia Chiquinquirá, además de los sectores El Matacho, Carmona, El Calvario, al igual que vías como: la avenida Medina Angarita; centros educativitos como: las Escuelas “Rosario Carrillo Heredia”, “Mario Briceño Iragorry”, “Juan Bautista Carrillo Guerra”, “Américo Briceño Valero”.
El periodismo
Como periodista fue fundador de los periódicos: «Principios» en 1931 (Mérida); en 1932, «Preludios» en Trujillo del cual era Co-director junto con Luis F. Mendoza y Juan Valera, colaboró en los periódicos «La Idea Juvenil», «El Rehabilitador» y «Nosotros», como también en el «Oriental» y «El Timonero» de Boconó. En Caracas fue colaborador de «El Universal». Formó parte del Grupo Literario «Mañana», conjuntamente con Víctor Valera Martínez, Manuel Andará Olivar, Hugo Unda Briceño, Sabino Braschi y Luis F. Mendoza.
Honrar honra
La fructífera carrera desarrollada por Mario Briceño Perozo en su infinidad de actividades ligadas a la cultura Nacional lo llevó a pertenecer a diferentes instituciones y corporaciones tales como: «Mención Honrosa», premio de estímulo a la investigación y estudio de la Historia Militar Peruana; Medalla de Plata del Círculo de Escritores y Poetas Iberoamericanos de Nueva York; Hijo Adoptivo de la ciudad de Coro; Hijo Adoptivo de Mitare, estado Falcón. De las condecoraciones cabe destacar; Orden del Libertador; Orden Andrés Bello; Medalla del Ateneo de Trujillo y Orden al Mérito Profesional Cristóbal Mendoza.
Además de director del Archivo General de la Nación, fue presidente de la Junta Superior de Archiveros de la República; Bibliotecario Archivero de la Academia Nacional de la Historia; profesor titular de la Escuela de Bibliotecología y Archivología de la U.C.V. miembro activo de la Asociación de Escritores de Venezuela, del Colegio Nacional de Periodistas (DF); Asociación de Profesores de la U.C.V.; Asociación Bolivariana de Venezuela e Instituto de Cultura Hispánica; Bibliotecario de las Academias Venezolanas, correspondiente a la Real Española de la Lengua.
Se dedicó desde su infancia al estudio de la historia. El apellido Briceño está muy ligado a la evolución histórica del estado Trujillo. Basta dar una hojeada a ésta y lo encontraremos presenté desde su fundación. Oviedo y Baños mencionan entre los primeros pobladores de la ciudad de Trujillo, a Sancho Briceño y durante el periodo colonial e independentista, igualmente está salpicada de este apellido la historia.
Sus obras
Entre sus obras, tenemos: Historia del estado Trujillo; Orígenes Sociales, 1939; Trilla, 1942; Notas para la Historia de una Escuela, 1950; Breve historia de una máxima de Bolívar, 1953; Don Simón Rodríguez, Maestro de América, 1954; El Diablo Briceño, 1957; Historia Universal, 1963, Bolívar en Mitare, 1965; El Archivo del Precursor, 1966; Bolívar y el ideal democrático, 1968, El Bolívar que llevamos por dentro, 1968; La ciencia de los Archivos, 1969, Archivos venezolanos, 1970, Don Cristóbal Mendoza, Abogado de la Libertad, 1972; Cruz Carrillo en el Panteón Nacional, 1972; Bolívar y el 5 de Julio, de 1980; ¿Cómo desmitificar a Bolívar?, 1983; El Alma Nacional, 1983. Mario Briceño llegó a escribir más de cien libros,- miles de artículos y discursos.
Vena poética
Aunque se consideraba menos realizado como poeta, Briceño Perozo logró publicar tres obras de poemas; Sones de Tiorba, Trilla y Pretérita Inquietud. La producción de este hombre muestra su amplitud y consistencia al mencionar que su obra publicada alcanzó hasta 15 volúmenes, amén de innumerables artículos publicados en revistas folletos y periódicos.
Identidad Nacional
Se convierte en archivero, al realizar el primer curso para formación de técnicos de archiveros y bibliotecarios de Sevilla-España en el año de 1962. Hablar del Archivo General de la Nación es hablar de Mario Briceño Perozo, a él se dedicó durante más de la mitad de su vida, con toda la pasión del historiador que conocía que en él estaba como si dijéramos la partida de nacimiento, la vida e identidad histórica de Venezuela. Por eso quisimos conocer el camino trajinado que lo puso frente a lo que pudiéramos llamar, sin temor a equivocarnos, su gran obra.
Un poema
El Libertador
¡Oh! capitán del viento y de la estrella
con las huestes ardidas de volcanes.
A su empuje se rinden los titanes
Y una antorcha se alza en cada huella.
Un ciclo de la historia se sella
con su verbo anudado de huracanes;
su mismo afán fatiga los afanes
y en su espada se mira la centella.
Nada escapa a su genio pluriforme,
en todo excelso, como el mar, enorme,
y como el mar ciclópico en su impulso.
Griego y latino, y español e indiano,
con el sol en la palma de la mano
y un enjambre de pueblos en el pulso.
Mario Briceño Perozo
Fuentes y Consultas:
Archivos Diario de los Andes, Valera, 1978-1995. Boletín del Archivo Histórico de Miraflores, números 150-153, 1997-1999. Los Briceños, Entronques Familiares, Pedro José Casas Briceño Tomo I-II, 1998. De Letras Venezolanas, Carlos Murciano. Academia Nacional de La Historia, 1985. Don Cristóbal Mendoza, Abogado de la Libertad, Mario Briceño Perozo, 1986. Mario Briceño Perozo o el imposible olvido, Luis Alfonso Bueno, 1996. Trujillo 100 años de imágenes, Luis González, 1987. Testimonio del Periodismo Trujillano, Luis González, 1987. Folleto, Tópicos de Maravén, 1980 Cruz Carrillo y Mario Briceño Perozo, 1953. Archivo Diario Panorama, junio 1978. Testimonios de Luis González, Periodista, Historiador y Cronista, 2017. Dr. Diana Rengifo, historiadora y yerna del Dr. Briceño Perozo. Testimonios de Julio César León, amigo personal de Mario Briceño Perozo, 2016. “Gente de Venezuela” de Jorge Maldonado Parilli. Centrolombardo.edu.mx