Bulboaca (Moldavia), 1 jun (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, se mostró hoy seguro de que la próxima cumbre de la OTAN, que se celebrará en Lituania el 11 y 12 de julio, enviará un «mensaje claro» de «apoyo» a Ucrania y se mostró «favorable» a que haya «garantías más fuertes» y «tangibles» de seguridad para Kiev.
«Yo creo, en efecto, que Vilna va a enviar un mensaje claro de apoyo a Ucrania y a los ucranianos», manifestó el presidente francés en una rueda de prensa en Moldavia tras la celebración de la segunda cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE).
Macron respondió así a una pregunta sobre la potencial integración de Ucrania en la Alianza y, respecto a la posición concreta de su Gobierno, aprovechó para reiterar lo que ya había manifestado este miércoles durante una visita a Eslovaquia.
«Lo he dicho ayer, por mi parte soy favorable a que haya garantías más fuertes, más claras y tangibles en materia de seguridad», indicó Macron.
Para el mandatario francés, es «imperativo que la cumbre de Vilna pueda dar esa garantía fuerte, garantías nuevas y creíbles», así como una nueva «perspectiva» de futuro para los ucranianos, además de un «mensaje claro» a Rusia.
Subrayó también que Francia está lista para formar pilotos de cazas y técnicos aeronáuticos ucranianos, un compromiso que hoy ratificó en una reunión en Moldavia con Volodímir Zelenski.
A pesar de esto, Macron se mostró abierto a un diálogo con Moscú «si la ocasión se presenta y en función del contenido».
En cualquier caso, el jefe de Estado galo celebró la imagen de unidad que los países europeos dieron este jueves en la segunda cumbre de la CPE. «El mensaje que enviamos desde aquí a Rusia -dijo- es claro: un mensaje de unidad y de apoyo unánime y claro a Ucrania y al pueblo ucraniano».
También felicitó al país anfitrión por la organización de un evento que, con casi medio centenar de jefes de Estado europeos presentes, muestra que «no se abandonará a ningún miembro de la familia europea». Igualmente, se expresó optimista respecto al futuro ingreso de Moldavia en la Unión Europea.
«No podemos dejar a Moldavia de lado teniendo en cuenta su geografía, las realidades geopolíticas de su territorio y el coraje con el cual han afrontado este conflicto desde el principio, tanto en el plano de la desestabilización, como en el plano energético como en el plano humanitario», reflexionó.
En este sentido, Macron abogó porque la Unión Europea simplifique sus trámites para lograr «ir más lejos», ya que para él es claro que «debe anclar los Balcanes occidentales, Moldavia y Ucrania» en su «espacio político».
Esa visión, según Macron, precisa de un «espíritu un poco más libre» en la UE, que ya funciona «muy lenta» con los 27 miembros actuales.
«Es el momento de la ambición política, es el momento de reinventar nuestro marco», animó.
Por último, Macron también se expresó sobre el plan de su país y de Alemania -bajo mediación de la Unión Europea- para normalizar las relaciones entre Serbia y la ex provincia de Kosovo, que en 2008 declaró de forma unilateral su independencia aunque Belgrado sigue sin reconocerla.
A este respecto, dijo que los líderes de ambos bandos están considerando los requisitos impuestos por París y Berlín y que espera que la próxima semana se sienten a la mesa con «respuestas claras».
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