Unas de las principales diversiones de los trujillanos ha sido el cine. Durante muchas generaciones, el cine fue un lugar de encuentros y reencuentros para familias, amigos, enamorados y para hacer nuevas amistades.
Recuerdo que en la Semana Santa, siempre se veían familias enteras ir al cine para ver películas relacionadas con la pasión de Jesucristo, en diciembre para ver películas navideñas y para ver los diferentes estrenos de la cartelera mundial.
El Trujillo de esa época era pujante económicamente y socialmente existían muchos negocios, restaurantes, luncherías, areperas como: El Alfa, La Gran Tostada, carro de arepas El Periquito, detrás del palacio con sus arepas de mortadela y queso a 1 bolívar y de carne, pescado o pollo a tres reales, Auto Lunch El Palacio, El Isorano, La Panadería Europa (con una sinfonola o rockola con la música juvenil del momento), Fuente de Soda El Ávila y otros negocios, además de las ventas ambulantes de empanadas, churros, cepillados, suplementos o historietas y también hasta una zona de «tolerancia» detrás de Palacio de Gobierno, en la que llegaron a despojarse de una parte de su inocencia sexual muchos jóvenes al compartir por primera vez con una mujer.
Recuerdo con nostalgia que muchacho asistía al cine y luego a la retreta, cuando uno invitaba al cine a una muchacha que le atraía, al ella aceptar prácticamente era un sí como novia y la emoción que sentía uno al saber que al apagar las luces del cine podría darse en cualquier instante el primer beso era muy hermoso y emocionante. También las cercanías al Cinelandia, específicamente en la Zapatería la Manola, era el sitio de encuentro de los amigos sin distingo social, todos sin ninguna exclusión compartimos esos momentos de encuentro y recreación.
Cómo desearíamos que esos tiempos regresaran, pero no podemos y lo sí que podemos hacer es contarle a nuestros hijos, nietos y nuevas generaciones de lo bello que fue nuestra infancia y juventud, donde no había la inseguridad, peligro, maldad, tanta pobreza material y espiritual que hay hoy en día.
Entre los cines de Trujillo tenemos: el primer cine de Trujillo estuvo ubicado en la casa de la Familia Briceño Vásquez, el 3 de diciembre de 1920 fue cuando se proyectó la primera producción cinematográfica en Trujillo. También hacían representaciones teatrales en esta casa hoy demolida cuya dirección era en la avenida Independencia con calle Regularización de La Guerra, esquina oeste de la plaza Bolívar de Trujillo (los ciudadanos Carlos Manuel Briceño y Francisco “Chico” de Paula Briceño Vásquez hacían también representaciones teatrales con el teatro familiar y público, el 5 de julio de 1942, donde se estrenó la obra Mana Juana del periodista Segundo Joaquín Delgado, la cual la terminó de escribir en 1938 y publicada en 1942 en Maracaibo); el Teatro Sucre, el 19 de diciembre de 1926 (la construcción se inició el 22 de febrero de 1926); Cine Trujillo, el 20 de abril de 1941 (estaba ubicado al lado del Hotel Polonés, en el edificio de la Dirección de Extranjería, frente de donde hoy se encuentra la Panadería Ideal); Club Cruz Carrillo, el 15 de diciembre de 1941; Cine Ateneo en Trujillo, el 13 de noviembre de 1942; Cine, Teatro y Títeres de César Colmenares y su esposa Pastora, el 9 de octubre de 1945, quien se presentaba en los distintos sectores de Trujillo; Cinelandia, el 9 de octubre de 1948; Mirabel, el 11 de junio de 1950; Colegio Santa Ana, el 26 de julio de 1956; Cine Comunitario de la Familia Rosario Tavera, el 24 de noviembre de 1957, el cual era proyectado en la sala de la casa; Cine de Santa Rosa, el 7 de julio de 1958 donde la Familia de Juan Pacheco (luego Capiello Torres, lo reabrió donde hoy funciona la firma comercial Fernández Motors y había que llevar las sillas); Cine del doctor Alirio Lomelli Verde en el garaje de su casa en el sector Las Araujas, avenida Diego García de Paredes y en la Cárcel Nacional de Trujillo para los presos; el Cine Comunidad donde funcionó la casa del URD (Unión Republicana Democrática), propiedad de la familia Delgado Chalbaud, Gudiño Araujo, hoy de la familia Lemus Gudiño, en la avenida Independencia a una cuadra de la plaza “Mariscal de Ayacucho Antonio José de Sucre”; Cine del Colectivo de Literatura, Música y Cinematografía “Simón Bolívar”, desde el 19 de abril de 1970 hasta la actualidad; Cines Bella Vista y Libertad en Valera; Cine Boconó en Boconó; todos con los famosos palco y galería y las carteleras de exhibición de películas. El ciudadano colombiano de profesión optometrista Nicolás Casique, era dueño de un cine itinerante y de una sala de cine en el sector “El Carmen”, avenida Independencia donde funcionaba el Circo “Zanzetti” en el local “Mi Refugio”. Noche tras noche, de lunes a viernes, durante 15 años, desde el 19 de diciembre de 1930 hasta el 18 de octubre de 1945, proyectó películas en toda la ciudad de Trujillo, día en que cayó preso por los sucesos o golpe contra el General Isaías Medina Angarita y fue deportado a Colombia. Nicolás Casique andaba con una sábana blanca que le servía de pantalla.
En el Cinelandia y el Mirabel las funciones eran de lunes a sábados, todas las noches de 7:15 a 9:15 y los domingo de 10:30 am; Vermout hasta las 12 del mediodía; Matinée de 3:15 pm hasta las 5:15 pm y Vespertino de 5:15 pm hasta 7:15 pm y de 7:15 pm hasta 9:15 pm.
En estos cines se proyectaban las películas protagonizadas por Charles Bronson, Marilyn Monroe, Lee Van Cleff, Jean Moreau, Vittorio Gasman, Vittorio de Sica, Carlos Ponti, Raquel Welch, Jane Fonda, Claudia Cardinale, Brigitte Bardot, Mary Pickfor, Jean Manfields y sus voluptuosos senos, Clint Eastwood, Burt Lancaster, Ives Montand, Kirk Douglas, Anthony Queen, Steve McQueen; las producciones cinematográficas: La Batalla de Argelia, Tommy, La vida del Revolucionario Mateotti, el editor Gian Giácomo Feltrinelli, el productor Román Polansky, la actriz Sharon Tate (con su famoso sacrificio en la misa negra de Charles Mason), Anna Pierangelli, James Dean, Elvis Presley, Historia de Amor con Ryan O‘Neal (protagonista junto a Mía Farrow en la “Caldera del Diablo”) y Alice McGraw; Morir de Amor con la francesa Annie Girardot.
También se proyectaban las películas: El Último de Los Mohicanos, El Espinazo del Diablo, Martín Valiente, Rodolfo Guzmán Huerta “El Santo El Enmascarado de Plata”, Alejandro Cruz “Blue Demon”, Mil Máscaras, Viruta y Capulina, Los Secretos de la Cosa Nostra, Estado de Sitio, Las Aventuras del Pícaro Gato Fritz; y en Semana Santa, las famosas películas sobre: La Pasión y Muerte de Jesús de Nazaret, Sansón y Dalila, Hércules, Ulises, Masiste y los Espartanos. Para esa época el costo de la entrada al cine era de bolívares uno (1) para quienes se ubicaban en categoría de preferencia o palco, y bolívares cero cincuenta (0,50), los ubicados en galería. La gente, antes de entrar y al salir del cine, acostumbraba a intercambiar suplementos (historietas) de tiras cómicas y dramáticas, tales como: Tarzán, Kaliman, Tawa, Mortadelo y Filemón, Aniceto, Bazán, El Zorro, El Llanero Solitario, Hermelinda, Memín, Roy Rogers, Hopalong Cassydi, Susy, Archie, Roy Rogers, El Llanero Solitario, Gene Autry, Martín Valiente. El Santo “El Enmascarado de Plata”, Blue Demon, Mil Máscaras, Viruta y Capulina se intercambiaban las novelas vaqueras “Estefanía”, entre otros.
En ese tiempo se oían las novelas que transmitían por Radio Rumbos y Radio Continente: El Gavilán Colorado o Cuando los hombres son bestias, Leonardo Moncada, Que lindo es querer, Juan sin miedo, Martín Valiente, El Gavilán Colorado, el Derecho de Nacer y por Radio Valera el programa de historias de terror, horror y suspenso “Ciclo Terror”.