Los cadáveres de cuatro “bachaqueros”, que se dedicaban al contrabando de gasolina hacia el vecino país, fueron encontrados en el lado venezolano de tres trochas que comunican con Colombia, según el reporte de las autoridades policiales que atribuyen los crímenes a miembros de presuntos grupos paramilitares, que por cuestiones de índole territorial, mantienen una sangrienta guerra que ha cobrado la vida de decenas de personas a ambos lados de la frontera.
De los fallecidos, tres fueron levantados por las autoridades colombianas, por medicas de carácter humanitario y ante los pedidos de familiares, en tanto que el cuarto, correspondió a detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas, y trasladado a la morgue del Cementerio Municipal de San Cristóbal, debido a que se encontraba en avanzado estado de descomposición.
Cadáver en trocha “El Tato”
Estas última persona fue identificada como Paulo Hisraim González Quintana, de nacionalidad venezolana y 31 años de edad y fue encontrado en horas de la mañana de este martes en una estrecha vereda que conduce a una zona boscosa de la trocha “El Tato”, a donde llegaron los detectives contra homicidios de la sub delegación de Ureña, para hacer el levantamiento de ley.
Un hombre que llego al lugar, cuando la policía practicaba la referida diligencia, manifestó hizo el reconocimiento, manifestando que el fallecido era su hijo, que se dedicaba al contrabando de gasolina hacia el lado colombiano y estaba desaparecido desde el pasado sábado 13 de abril.
Los detectives, al momento de proceder al levantamiento del cadáver, observaron que tenía en el tobillo derecho un dispositivo electrónico de localización GPS, que por lo general es colocado a personas que han confrontado problemas con la justicia y, se les coloca al momento de recibir algún beneficio procesal.
No obstante, se abstuvieron de hacer comentarios sobre el particular y tan solo se limitaron a decir que las investigaciones se están iniciando y anunciaron a familiares, que el cadáver, debido a un avanzado estado de descomposición, sería trasladado a la morgue del cementerio municipal de San Cristóbal, para la respectiva autopsia y demás tramites de tipo forense
Trocha “El Águila”
En la trocha “El Águila”, que comunica con el sector de Boconó, fueron encontrados los cadáveres con impactos de bala y en descomposición de dos jóvenes que el pasado sábado fueron secuestrados por hombres armados, en las inmediaciones de un auto lavado ubicado en El Escobal, donde trabajaban como lavadores de carros.
Los fallecidos fueron encontrados en plena trocha, por contrabandistas que de inmediato avisaron a los familiares de uno de ellos, que fue reconocido como Oliver Yesid Cristancho Gutiérrez, de 17 años, que fue reconocido plenamente por su vestimenta y un tatuaje de “Yamile”. De la otra persona no se revelaron detalles.
Se presume que los dos jóvenes, dado el estado de descomposición, fueron asesinados el mismo sábado, luego que fracasaran en su intento por cobrar rescate por su liberación, llamando al dueño del auto lavado, que comunicó la situación a la policía de Cúcuta, que logró apresar a dos sujetos en relación al caso.
En este caso, como en el anterior, familiares admitieron que los fallecidos también se dedicaban a contrabandear con gasolina desde territorio colombiano y el mismo presenta una evidencia física para vincularlo con los grupos paramilitares, puesto que junto a los cadáveres, se encontró un panfleto donde se pretendía justificar el doble crimen diciendo que los habían matados “ por sapos del Eln y Epl”. Atentamente, los paramilitares”. Los investigadores intentan establecer si este panfleto es auténtico o, si por lo contrario, se trata de un ardid, para intentar desviar las investigaciones.
Los dos cuerpos se encontraban en el lado venezolano y las autoridades del vecino país, invocando razones de tipo humanitario, procedieron al levantamiento y trasladado hasta el Instituto de Medicina Forense, en Cúcuta.
Trocha “La Playita”
El otro caso ocurrió en la trocha que desde San Antonio del Táchira comunica con la población colombiana de La Parada, donde fue encontrado el cadáver de un hombre de unos 30 años de edad, no identificado oficialmente y presentaba un impacto de bala en la cabeza.
Las autoridades del vecino país, igualmente por razones humanitarias, se encargaron del caso y llevaron al fallecido hasta la morgue en Cúcuta. Aun cuando no se reveló detalles del mismo, se dijo que este ciudadano laboraba como “Bachaquero” y se dedicaba al contrabando de gasolina, versión que los investigadores intentan confirmar.