Los cadáveres de dos jóvenes con impactos de bala y sus rostros parcialmente destruidos, fueron encontrados este jueves, en el sector La San Juana, municipio Ayacucho del estado Táchira, según el reporte de las autoridades policiales que consideran el ajuste de cuentas, como probable causa, según lo expresado por funcionarios que estuvieron en el lugar de los hechos y se encargan de las correspondientes investigaciones.
Aun cuando no se tiene mayores detalles sobre los fallecidos, se dijo que los detectives de la Base Contra Homicidios del Cicpc de La Fría, que tiene bajo u su cargo las averiguaciones, están trabajando en identificación plena de los fallecidos y que ambos cadáveres fueron ingresados a la morgue del Hospital Central como desconocidos, a pesar que uno de ellos fue reconocido como Miguel Ángel Peña Vera, de nacionalidad venezolana y 25 años de edad.
Los dos cuerpos fueron encontrados por vecinos en via publica, en las inmediaciones de un establecimiento conocido como “El Rancho de Zoila”, hasta donde se trasladaron en primera instancia comisiones de la policía estadal y luego los detectives del Cicpc, para el respectivo levantamiento.
El hallazgo fue considerado como “macabro”, ya que los dos hombres además de presentar heridas de arma de fuego en diversas partes del cuerpo, tenían el rostro destrozado en más de un sesenta por ciento, lo cual fue atribuido a los perros, que devoraron parte de los cuerpos. Esta situación ha dificultado en primera instancia un reconocimiento por parte de los lugareños y demanda mayor trabajo en la investigación que hacen los detectives del Cicpc.
Por este motivo se encargo a los forenses que recibieron el cadáver en la morgue del Hospital Central de San Cristóbal, proceder a la necrodactilia y tomar muestras de sangre y tejidos, en caso que se haga necesario un estudio de ADN.
Algunas personas comentaron que los ahora fallecidos fueron trasladados en motocicletas, hasta el sector de la San Juan, en las inmediaciones de San Juan de Colón, por sujetos fuertemente armados que luego de les dispararon los dejaron en el via publica. También dijeron que los vecinos, notificaron sobre lo ocurrido a la policía, pero pasaron las horas sin que ninguna autoridad se hiciera presente en el lugar y por eso los perros devoraron parte de los cadáveres. Sin embargo, los declarantes no aclararon a que organismo de seguridad hicieron la notificación y solo se limitaron a decir que ambos jóvenes fueron trasladados desde las aldeas que quedan en la parte alta del San Juana.