Luis Ramírez, presidente de Corposalud, informó que la mortalidad neonatal se debe a múltiples factores, entre ellos el mal control de las madres durante el embarazo, además de la falta de antibióticos para tratar infecciones urinarias, y los altos costos, que evitan a las embarazadas la adquisición de los mismos.
En este sentido, informó que en lo que va de año se han presentado 14 muertes neonatales en el Hospital Central de San Cristóbal, “se trata de bebés pretérminos cuyos pesos oscilan entre 600 y 900 gramos”, añadió.
También, se refirió a las muertes maternas y agregó que el 2017 cerró con 24 casos y en lo que va de año se han presentado tres decesos.
Del mismo modo, Noel Calderón, director principal del Consejo Directivo de Corposalud, explicó que según el análisis epidemiológico de este año comparado con el año anterior coincide con la cantidad, lo que indica una misma tendencia hasta los momentos.
“Durante 2016 se presentaron casi 500 muertes infantiles de las cuales el 80% prácticamente fueron muertes neonatales, niños menores de un mes, cuyas causas estaban precisamente relacionadas con el control del embarazo y la atención obstétrica inmediata”, añadió
En cuanto a las causas de las muertes, explicó que se deben a múltiples factores entre ellos una nutrición inadecuada, falta de suministro de ácido fólico y polivitamínico, trayendo como consecuencia la interrupción, complicación del embarazo o hasta el fallecimiento de la madre y el primogénito.
“Lo ideal es que no ocurra ninguna muerta materna ni infantil, sin embargo, en el año 2017 tuvimos 24 muertes maternas y el 2016 presentó el mayor número en el estado Táchira cerrando con 28 decesos, la más alta cantidad presentada en las últimas dos décadas”, agregó.
NP