Jesús Salvador Albornoz, de 44 años, falleció en un presunto enfrentamiento con una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) de la subdelegación Sabana de Mendoza. Sin embargo, los familiares contaron otra versión. Sostienen que las autoridades cometieron abusos en la residencia del hoy difunto. De acuerdo a su relato, dentro de la casa estaba la mamá, la hermana y los sobrinos de él, quienes debieron presenciar cómo lo sacaban, presuntamente de manera violenta.
No obstante, a todos ellos los encerraron en una de las habitaciones para que no vieran nada más. Solamente escucharon los disparos, que seguramente segaron la vida de Albornoz.
Si había estado preso
El hoy difunto trabajaba en un trapiche de Él Dividive, en el municipio Miranda, y de esta manera se ganaba el sustento de su casa. Sin embargo, sus seres queridos admitieron que si había estado preso, pero por un mal entendido con unos aires acondicionados. «No era mala conducta » señalaron los familiares. Deja cuatro hijos y una viuda