El primer ministro francés, Edouard Phillipe, declaró este martes que se finaliza definitivamente la temporada 2019-2020 de la Ligue 1 de Francia (primera división), señalando que no podrá reanudarse ningún tipo de competencia profesional hasta el mes de septiembre. Se desconoce aún si esta situación deje desierto el título que parecía tener asegurado el Paris Saint Germain, que tenía una ventaja considerable con respecto a su escolta.
Dicha aseveración toma por sorpresa incluso a los dirigentes de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) del país galo, quienes tenían previsto reiniciar los entrenamientos a partir del 11 de mayo y reanudar la competición el primero de junio, algo que ya parece no estar latente, aunque tanto los miembros de la Federación como los de la LFP intentarán reunirse en los primeros días de mayo para decidir sobre los descensos, ascensos y equipos clasificados a los torneos europeos (Champions y Europa League).
Esta decisión podría traer considerables pérdidas económicas para todos los clubes que hacen vida en el fútbol francés, especialmente luego de haber llegado a un acuerdo para los derechos de televisión el pasado jueves y a raíz de esto pudiera sufrir algunos cambios sustanciales.