Madrid, 25 oct (EFE).- El líder opositor venezolano Leopoldo López llegó este domingo a Madrid, donde se reunió con su familia, tras abandonar su país de manera «clandestina» a través de la frontera de Colombia, y asegurar que proseguirá la lucha «por la libertad».
«Muy feliz de reunirme con mi hijo en Madrid y disfrutar su libertad en compañía de la familia. Gracias a España por su apoyo consecuente a los principios democráticos», enfatizó en Twiiter el padre de López tras reencontrarse ambos.
Los padres del líder opositor tienen nacionalidad española desde diciembre de 2015, concedida entonces por el gobierno del conservador Mariano Rajoy, y su progenitor, Leopoldo López Gil, es actualmente diputado del Parlamento Europeo por el Partido Popular español.
También su esposa -Lilian Tintori- y sus tres hijos viven en la capital española.
El Gobierno español, que dirige el socialista Pedro Sánchez, confirmó que López se encontraba ya en Madrid después de abandonar, por una decisión «personal y voluntaria», la residencia del embajador español en Caracas.
López se encontraba allí en calidad de «huésped» desde el 30 de abril de 2019, después de participar en un fallido levantamiento militar junto al presidente del Parlamento venezolano, Juan Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por unos 50 países, España entre ellos.
La salida de López abrió una incógnita en el liderazgo del bloque antichavista, en el que ha ejercido una notable importancia, incluso sobre Juan Guaidó, cabeza visible de la oposición venezolana.
Y esto a poco más de un mes de las elecciones legislativas en Venezuela del 6 de diciembre, cuestionadas por la mayoría de la oposición al Gobierno del presidente Nicolás Maduro.
«España reitera su convencimiento de que la crisis multidimensional que atraviesa Venezuela requiere de una salida negociada, dirigida por los propios venezolanos que permita la celebración de elecciones presidenciales y parlamentarias con plenas garantías democráticas», dijo hoy en un comunicado el ministerio español de Exteriores, que recordó la disposición de ayudar en ese proceso.
LLEGADA DISCRETA A ESPAÑA
El ministerio español condenó las detenciones de personal de la embajada de Madrid en Caracas y los registros realizados en casas de trabajadores adscritos a la representación tras la salida de López al entender que «violan» la Convención de Viena de Relaciones Diplomáticas.
Un vigilante privado de la legación y una empleada de López fueron arrestados este sábado, después de que el político saliera de la residencia del embajador español. informó a Efe una fuente diplomática.
El viernes pasado el opositor escapó de Venezuela, según explicó su padre a Efe, y en el plazo aproximado de 48 horas ha llegado a España, entre diferentes versiones sobre dónde se encontraba realmente hasta este momento y conjeturas sobre si voló desde Miami (EEUU).
La llegada, no obstante, fue totalmente discreta, sin ser visto por la prensa, que lo esperaba en el aeropuerto de Madrid con gran expectación, hasta que fuentes familiares confirmaron que ya estaba con su familia.
«CONQUISTAR LA LIBERTAD»
«Venezolanos, esta decisión no ha sido sencilla, pero tengan la seguridad de que cuentan con este servidor para dar la lucha desde cualquier espacio. No descansaremos y seguiremos trabajando día y noche para alcanzar la libertad que nos merecemos todos los venezolanos», explicó el opositor venezolano en uno de sus mensajes publicados en Twitter en las últimas horas.
Y anunció: «En los próximos días ampliaremos en detalle las acciones que nos proponemos realizar a favor de la libertad de nuestro pueblo».
Resumió también su trayectoria antichavista: «Como siempre, desde las calles con el pueblo, o en una cárcel militar, desde un tribunal injusto o perseguido en una embajada, todo nuestro tiempo y energía será para serle útil al pueblo venezolano en la conquista de su libertad».
Líder del Partido Voluntad Popular (VP), López fue arrestado en 2014 y sentenciado a 14 años de cárcel, acusado de encabezar actos violentos en las marchas antigubernamentales que se llevaron a cabo ese año.
Cinco años después, tras un periplo por la prisión de Ramo Verde pasó a arresto domiciliario y luego llegó a la residencia del embajador español, Jesús Silva, donde permaneció hasta el viernes.
Desde allí, reconoció en una entrevista con Efe, la única concedida durante su estancia en la sede diplomática, que una intervención militar en Venezuela es una opción que sigue presente entre la oposición al Gobierno de Nicolás Maduro, porque es una alternativa legal que contempla la Constitución.