La agudización de crisis eléctrica que vienen padeciendo los estados andinos en especial, Táchira y Mérida, no es más que la consecuencia de la ineptitud e incapacidad del gobierno nacional, además de la corrupción galopante que hizo estragos en este sector, ante la mirada indiferente y hasta cómplice de quienes hoy ostentan el poder.
Lelis Bautista, directora de política de la gobernación de Táchira, rechazó las afirmaciones hechas por el vicepresidente del PSUV Diosdado Cabello quién responsabilizó a los gobernadores de dichas entidades del colapso eléctrico.
“El grado de cinismo de éste señor es impresionante, al parecer se le olvida que durante la gestión anterior, revolucionaria por cierto, los apagones fueron también una constante y no tomaron ningún tipo de medidas para paliar la situación, y ahora viene con su cara tan lavada a endorsarle la responsabilidad a los mandatarios regionales de las entidades andinas sólo por ser opositores”, aseguró.
¿Hasta cuándo- se preguntó Bautista- los voceros del gobierno nacional van a seguir corriendo la arruga en cuanto a los problemas que afectan a los venezolanos?, no es sólo la desidia y el abandono del sistema eléctrico, sino también la hiperinflación, la inseguridad, la falta de efectivo, el colapso de los servicios públicos y muchas cosas más que merman la calidad de vida de la población y que es deber de quienes ejercen funciones de gobierno resolver.
“El pueblo en su nobleza calla y ha tenido que conformarse con las medidas tomadas mientras las autoridades resuelven el problema, lo cual por lo que se ve va para largo pues el cronograma de racionamiento establecido tampoco se cumple y como consecuencia de éste desorden se ha producido la muerte de varios tachirenses aunado al incremento de la inseguridad y el daño de los artefactos eléctricos”, aseveró la titular de política.
En relación a la seguridad, Bautista recomendó a los organismos de seguridad del estado el diseño de un cronograma especial de trabajo -que si se cumpla- a raíz de los cortes del fluido eléctrico, a fin de que las comunidades puedan contar con servicio de patrullaje y seguridad durante esas horas en las que no cuentan con luz, a menos que les dé temor salir en medio de la oscuridad.
NP