Los habitantes de otras localidades, se trasladan a Valera y generan largas colas diariamente, desde el amanecer en las estaciones custodiadas por las autoridades
Los trujillanos deben invertir de cuatro a seis horas para poder surtirse de combustible. Esto a raíz de la centralización de la distribución de la gasolina en la región y el retardo en la periodicidad, con la cual llegan los cargamentos a las gasolineras.
La Zona Operativa de Defensa Integral (Zodi) Trujillo y la Guardia Nacional (GN) tienen bajo custodia ocho estaciones de servicio, ubicadas entre los municipios Valera y Carvajal. A estas les distribuyen un día de por medio.
El resto recibe cargamentos cada tres días. No obstante, en otros municipios, pueden pasar hasta un mes sin recibir gandolas de Pdvsa. Lo que ha originado que los habitantes de otras zonas se trasladan a Valera y generan largas colas diariamente y desde el amanecer en las estaciones custodiadas por las autoridades.
«Ayer no pude comprar gasolina, llegué a la cola y cerraron la bomba a las seis. Hoy llevo cuatro horas, ya me falta poco para llegar. Yo soy de la Quebrada y vengo todos los días a Valera. Allá no hay dónde poner gasolina» relató José Leal, habitante del municipio Urdaneta.
José Barrios, procedente de Rafael Rangel, indicó que él se trasladó desde las cinco de la mañana a Valera y todavía, a las once y media del día, no había puesto gasolina. «Es mejor venir para acá, porque es más seguro. Paso la mañana en la cola, pero es mejor que esperar quince días o más en Betijoque» expresó.
Consecuencia
Esta situación agrava la demanda del combustible en la ciudad de Valera, pues las estaciones de servicio en custodia, ahora deben abastecer a usuarios de otras localidades, como consecuencia de los permanentes escases de combustible