Hebert Carrizo
La segunda mitad del año pudiera ser mejor en términos económicos frente a lo que fue el primer semestre de 2023 en Venezuela, así lo expuso el economista y presidente de Datanálisis, Luis Vicente León durante una conferencia que ofreció en el marco de la LX Asamblea Anual de Acoinva.
En el evento desarrollado en las instalaciones del Hotel Cordillera, en la población de La Puerta, el reconocido analista repasó la economía nacional de los últimos años, sin pasar por alto los elevados niveles de inflación y escasez.
Basado en ese escenario, recordó que el parque industrial venezolano de hace una década estaba preparado para atender una alta demanda que hoy día se diluyó. “Somos una cuarta parte de lo que éramos en 2013 en el tamaño de nuestra economía. Las empresas fueron instaladas para atender un país que ya no existe”, manifestó León, quien a modo de ejemplo indicó: “Si en esos años el consumo demandaba mil unidades, en la actualidad solo demanda 250 unidades, si acaso 300”.
El reto empresarial
Ante esa realidad, considera que el reto empresarial es adecuarse a la realidad socio-económica e identificar las oportunidades para crecer dentro de la crisis y trascender.
Señaló que el año pasado se observó una mejoría económica que se reflejó en la capacidad de compra del venezolano, producto de la dolarización de facto y el efecto postpandemia, pero este 2023 sorprendió que el ritmo de consumo se contrajo en el primer semestre del año y no cumplió las expectativas de los analistas.
“En términos de consumo hubo una caída del 5% en los primeros seis meses de 2023, pero todavía hay un margen de maniobra, lo que sucede es que mucha gente se siente peor de lo que realmente sucedió en materia de economía”, expresó León, utilizando como referencia las encuestas de Datanálisis.
Desigualdad social
Parte de la percepción colectiva, el presidente de Datanálisis la atribuye a la desigualdad social existente en Venezuela y es que detalla que las realidades en el país no son lo mismo y hasta resulta difícil promediar, los sectores, regiones y estratos económicos.
A modo de referencia, detalló que la realidad que se vive en la capital y otras ciudades, no es la misma de las provincias. “Solo en Caracas, Valencia, Maracaibo y Lecherías se concentra el 61% de los dólares en efectivo que circulan en Venezuela”, acotó.
En esa distribución, “hay gente que en lo que va de año ha logrado hacer mucho dinero, e incluso más de lo que hizo en años anteriores, pero otro sector que realmente la está pasando mal”, mencionó el economista.
Al respecto, clasificó los estratos económicos y determinó que el 3,7% de los venezolanos es clase Alta; 12,9% Medio Emergente; 22,7% Medio Establecido; 26,8% Bajo con Oportunidades y 33% Bajo Excluido, esta última clasificación con ingresos que rondan el equivalente a los 190 dólares.
Tendencia en consumos
En general, precisa que de los ingresos familiares un 59,2% se destina a la alimentación y 9,2% a los productos de cuidado personal, justamente para cubrir esos y otros gastos 39,6% de los trabajadores están “matando tigres”; 35,7% busca productos más baratos y 34% reduce la cantidad de consumo.
Del consumo, destaca, que buena parte se satisface con las importaciones, pues se ha hecho más barato traer bienes de exterior que producirlos en el país, sin embargo, deja claro que el reto de los negocios es desarrollar un modelo que se adapte a la crisis y la sepa sortear.
Oportunamente cita el estudio de 25 analistas en economía e indican que los sectores, como energía (gas-petróleo), tecnología, telecomunicaciones, reparaciones y mantenimiento, alimentos, bebidas, salud y medicamentos son sectores clave para invertir en época de crisis.
A propósito de la energía fósil, León considera que si bien, en la actualidad se desarrollan alternativas de energía renovable, todavía falta para que se convierta en la principal opción de consumo, pues a pesar que es una tendencia de la que se habla con fuerza desde hace diez años, “en la actualidad ha logrado reducir solo el 3% del consumo de energía fósil en el mundo”, por lo tanto, el petróleo continúa siendo un importante commodities en los mercados internacionales.
Por último, dejó claro que las crisis son cíclicas y en ese proceso hay que saberse adaptar. “La crisis es un punto, no es la vida, la crisis siempre pasa y vuelven, así sucesivamente, por eso es necesario desarrollar un negocio que se adapte a la crisis”, concluyó.
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