La Vinotinto encara la Copa América sin partidos, con poco trabajo y con obstáculos para entrenar

La oncena dirigida por el argentino Fernando Batista llegará al estreno contra Ecuador sin amistosos y con inconvenientes para afrontar un torneo, al que claramente se le da una importancia secundaria en la planificación del cuerpo técnico y la FVF.

Por: Cristobal Naranjo /Crónica Uno

Caracas. La Vinotinto afronta la Copa América 2024 sin mucha urgencia y con una preparación discreta, que no incluye ningún partido amistoso previo al debut del sábado 22 de junio contra la selección de Ecuador.

Y es que, al menos desde la planificación, el torneo que se realizará en los Estados Unidos entre el 20 de junio y el 14 de julio tiene una importancia relativa y secundaria para el cuerpo técnico que lidera el argentino Fernando “Bocha” Batista y la propia Federación Venezolana de Fútbol (FVF).

Tanto Batista como el ente federativo han dejado claro que la prioridad son las eliminatorias mundialistas. Aunque, puertas adentro, en el grupo seguramente existe la convicción de llegar lo más lejos posible en el torneo continental.

Mi gran objetivo es la eliminatoria porque el sueño que tienen los venezolanos es el de ir a un Mundial, pero esta Copa América nos va a llevar a seguir siendo competitivos”, explicó Batista en el inicio de la concentración venezolana.

Muchos obstáculos

La logística armada y programación para el torneo más antiguo de selecciones nacionales parece ser coherente con la idea –errónea o no– de que la justa solo sirve de banco de pruebas: para ver jugadores nuevos y corregir de cara a la reanudación de las clasificatorias.

Venezuela, de hecho, empezó a trabajar más tarde que los rivales. Cuando la concentración vinotinto empezó el 10 de junio, ya selecciones como Uruguay, Brasil, Argentina y hasta Bolivia llevaban más de una semana de prácticas y partidos.

México, Ecuador y Jamaica, los adversarios del combinado en el Grupo B, también se juntaron desde mediados o finales de mayo a preparar la Copa.

La falta de amistosos, en principio, se justificó por dos razones: económica y por la preferencia del cuerpo técnico de evitar largos viajes, que supondrían menos entrenamientos grupales.

No obstante, el cuerpo técnico igual debe lidiar con obstáculos adicionales. Primero, el equipo se vio obligado a mudar su campamento de Bradenton en Florida a Tampa por el mal estado de la cancha y después el pronóstico del tiempo vaticina fuertes lluvias entre jueves y sábado de esta semana en la zona de concentración.

Además, la Vinotinto hará un larguísimo desplazamiento el domingo desde la ciudad donde está alojada hasta San José, lo que también incidirá en el ya recortado tiempo de trabajo.

Al margen de lo planeado, la Vinotinto debutará el sábado 22 de junio a las 6:00 p. m. contra Ecuador en el Levis Stadium de Santa Clara, California. Allí se empezará a ver si, con poco más que la fe, la selección nacional puede destacar en la Copa América 2024.

 

 

 

 

 

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