La versión en chino de «Despacito», una colaboración entre el cantante de Singapur afincado en Taiwán JJ Lin y Luis Fonsi, está arrasando en las redes sociales de Oriente, pese a que se trata de una interpretación más conservadora y menos sensual que la original en español.
En cuatro días, el vídeo colgado por el cantante puertorriqueño en VEVO ha recibido 2,1 millones de visitas, y la canción ha sido difundida en numerosos lugares de internet, recibiendo también cientos de miles de visitas.
Aunque el rotativo taiwanés Taiwan News aseguró hoy que el lanzamiento en mandarín es una estrategia «muy inteligente» por parte de Fonsi, que incluso canta una parte en chino y se dirige así a un enorme mercado de consumidores, algunos consideran que esta versión llega tarde.
«Ya se ha difundido la canción, al menos en Taiwán, y se han registrado versiones por parte de cantantes en chino. Fonsi debería haberla sacado antes», dijo a Lucía Lin, una estudiante de español en la Universidad Tamkang (Taiwán).
La letra de la versión en mandarín, compuesta por Harry Chang, es «más conservadora y menos sensual que la original en español, quizá para adaptarse al mercado de China continental», comentó a Efe el profesor de español en Taiwán Rigel Pérez.
El proyecto recuerda al de Fonsi con el cantante canadiense Justin Bieber en abril de 2017, que catapultó la canción al escenario mundial, y cuenta con la gran fama de JJ Lin en el mundo de habla china.
JJ Lin es uno de los cantantes en chino más galardonado en festivales y su último álbum, titulado en inglés «Message In a Bottle» («Mensaje en una botella»), salió en noviembre de 2017 y, en un solo mes, vendió casi medio millón de copias en formato digital.