La situación del pueblo yanomami es «catastrófica», pese a los esfuerzos de Lula, dice la ONG Survival

Fotografía de archivo en la que se registró a varios indígenas de la etnia Yanomami, en una calle de Boa Vista, en el estado amazónico de Roraima (Brasil). EFE/Raphael Alves

 

Río de Janeiro, 17 ene (EFE).- La organización no gubernamental Survival denunció este miércoles la «catastrófica» situación en la que se encuentra el Territorio Indígena Yanomami un año después de que el Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva decretara la emergencia sanitaria en la región.

De acuerdo con la organización, muchos mineros ilegales están regresando a la zona, no hay una respuesta clara de las fuerzas armadas que participan en la operación para expulsarlos y varios puestos de salud no están funcionando.

«A pesar de las promesas del presidente Lula cuando lanzó la operación para expulsar a los mineros hace un año, la situación actual en el territorio de los yanomamis es poco menos que catastrófica», señaló Fiona Watson, directora de investigación y campañas de Survival, citada en un comunicado.

Según datos del servicio sanitario oficial de la región yanomami divulgados por la ONG, la incidencia de la malaria aumentó un 61 % en 2023, con al menos 25.000 casos, y los niveles de gripe se dispararon un 640 %, de 3.203 casos en 2022 a 20.524 el año pasado.

«Entre enero y noviembre de 2023 murieron 308 indígenas, la mayoría niños menores de cinco años», señala Survival.

La organización también se refirió a un informe divulgado en diciembre pasado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en el que el organismo advirtió sobre la falta de agua potable, carencia de servicios sanitarios y campamentos mineros ilegales activos.

La situación también fue denunciada por Darío Kopenawa Yanomami, vicepresidente de la asociación yanomami Hutukara, quien, citado por la ONG, declaró que «incluso con el decreto de emergencia, el Gobierno no ha conseguido resolver la situación» y en la zona «aún se vive una situación de crisis humanitaria» pues los niños continúan muriendo de malaria, neumonía y tuberculis.

Frente a las críticas que se vienen dando, la ministra de asuntos Indígenas, Sonia Guajajara, dijo la víspera que la situación que se vive en el la Tierra Indígena Yanomami no se resolverá en el corto plazo.

«Así como fueron necesarias décadas de invasión para llegar a este punto, pueden ser necesarias décadas para restaurarlo todo», pues además de expulsar a los invasores hay que recuperar los ríos para que los indígenas puedan tener de nuevo agua potable para poder vivir de la pesca y la agricultura, aseguró.

La situación no ha pasado inadvertida para el Gobierno de Lula que la semana pasada ordenó que el operativo en la Tierra Yanomami, destinado a la asistencia de los indígenas y a cohibir la acción de los mineros ilegales, se convierta en una acción de Estado permanente.

En total serán invertidos 1.200 millones de reales (245 millones de dólares/226 millones de euros) para implementar las nuevas políticas públicas de asistencia a los indígenas, que incluyen una sede permanente del Gobierno en la zona.

El Gobierno además recordó que 307 niños de la etnia que padecían desnutrición fueron recuperados por las autoridades brasileñas en el último año y que el número de muertes por la enfermedad cayó de 44 en 2022 a 29 en 2023.

Este mismo martes se reiniciaron las operaciones policiales en la región y un campamento de mineros fue desmantelado por las autoridades, que decomisaron armas y municiones. La Policía Federal dijo a EFE que se trata del primer paso de una nueva ronda de operaciones en la región.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

.

Salir de la versión móvil