La flexibilidad para gestionar su tiempo y la posibilidad de organizar sus actividades sin la rigidez de los horarios tradicionales son las principales razones por las que 8 de cada 10 jóvenes venezolanos buscan empleos que incluyan la modalidad de teletrabajo.
Para esta generación, la autogestión y la comodidad pesan más que el esquema presencial, que perciben como una limitación a su independencia laboral y personal.
Así lo explicó Marysabel Suárez, licenciada en Educación y directora del Centro de Estudios en Línea de la Universidad Católica Andrés Bello, en entrevista con Unión Radio.
Recordó que el teletrabajo no es una novedad, sino una práctica que surgió en la década de 1970 con el avance de la informática y las telecomunicaciones. Pero fue la pandemia del covid-19 la que obligó a millones de personas a aceptar algo que muchos resistían por razones culturales y organizativas.
Señaló que cada vez más generaciones incorporan el trabajo remoto como parte formal de su vida laboral.
Además, destacó que el crecimiento del Internet y de las videoconferencias allanaron el camino para esta transición, pero el confinamiento global aceleró su adopción masiva.
Reconoció que encontrar empleo 100% remoto no siempre es sencillo, aunque han surgido opciones híbridas que ofrecen escenarios favorables para trabajadores y empresas.
Sin embargo, advirtió que el teletrabajo requiere habilidades de liderazgo y autogestión, cualidades que no siempre están presentes en quienes inician su vida profesional.
Horarios estrictos y control presencial no son opción
Aunque suelen valorar el contacto directo con las organizaciones para ganar experiencia, perciben que la rigidez horaria limita su capacidad de planificar sus actividades.
“Por eso la flexibilidad es tan valorada”, subrayó.