Siendo una figura importante dentro de la Iglesia venezolana, no podíamos desaprovechar la oportunidad de preguntar a monseñor Carlos Cabezas, obispo de Punto Fijo, sobre la propuesta realizada este lunes pasado, por la Conferencia Episcopal de Venezuela, en cuanto a la suspensión de las elecciones presidenciales el domingo 20 de mayo, hasta el último trimestre del 2018.
“Por supuesto que comparto lo que se ha suscrito en este documento a plenitud, porque son muchos los venezolanos que coinciden con nosotros en ver lo extemporáneo de las elecciones, también que creemos que es anticonstitucional por el organismo que lo convoca que sabemos que es ilegitimo y parcializado, pero además de ello, por la situación país que como bien se reafirma en el comunicado, no es el mejor momento para hacer unas elecciones”.
Indicó Monseñor Cabezas que es evidente la frialdad con la que se ha vivido esta campaña electoral, siendo inédito en Venezuela, porque las campañas siempre han sido muy seguidas, comentadas, movidas, mientras que ahora pareciera que no estamos a las puertas de unas elecciones.
¿Por qué cree que se da este fenómeno?
Los venezolanos estamos en otras cosas, buscando alimentos, medicinas. Vivimos momentos muy duros, nos parece inapropiado las circunstancias en las que nos encontramos, y de allí parte la petición nuestra, como Iglesia, postergar los comicios. Como bien lo dice en el documento, la forma como se ha llevado el proceso, con un órgano electoral que no es imparcial, la inhabilitación a políticos que pudieron postularse, el ventajismo del candidato de gobierno, el uso de los recursos de forma conveniente, en definitiva sabemos que las condiciones no están dadas, porque no serán totalmente transparentes. Nosotros no tenemos apetencia política, sino que queremos una Venezuela más próspera y cambiemos esta realidad tan dura que vivimos.
¿Con qué intención se hace esta petición?
Para abrir caminos de paz, fraternidad, de encuentro tan necesario en los venezolanos en los actuales momentos. Lamento a título personal, la terquedad a no escuchar la voz de los pastores de la Iglesia. Estamos a tiempo de rectificar y sería muy valiente de parte del gobierno que tomara esta decisión.
¿También el Grupo de Lima hizo esta solicitud, inclusive hace la petición de abrir el canal humanitario para Venezuela?
A nosotros que nos toca estar dentro de las comunidades, vemos con dolor lo que padece el pueblo y la pobreza con la que viven ante tantas necesidades. Definitivamente esta no es una cuestión política sino más bien humana, no sabemos qué fin se persigue con agobiar al pueblo y no ceder para dar alivio al venezolano, porque el mundo quiere ayudarnos y el gobierno saldría fortalecido si dejara atrás la soberbia.
¿Un sector de la oposición llama a no votar, qué mensaje daría usted para tomar la mejor decisión como venezolanos?
La Iglesia nunca dice vaya o no vaya, pero sí llamamos a la conciencia de cada venezolano. Somos suficientemente maduros, políticamente hablando, para tomar la decisión correcta. Los que decidan no votar no son abstencionistas, pero esa es una voz, de los que no participarán, que hay tomar en cuenta.