En libertad y acompañado de sus abogados defensores, Rafael Terán y Yunaira Padrón, el coordinador general de la Comisión Permanente de Derechos Humanos del Concejo Municipal de Pampán y Andres Bello, se trasladó al Diario de Los Andes para contradecir las declaraciones oficiales y a acusarlos de constantes vejaciones, justificadas en la «presunta existencia» de «El Cagón»
José Hernández Segovia, quien se identificó como el coordinador general de la Comisión Permanente de Derechos Humanos del Concejo Municipal de Pampán y Andres Bello, se trasladó al Diario de Los Andes para refutar la información publicada el pasado sábado 26 de mayo, sobre su detención junto a la ciudadana Meyerlin Suleidy García Mendoza. Acción practicada por la Guardia Nacional Bolivariana, el pasado miércoles 23 de mayo, e informada por el general de brigada Bilfred Bastidas Fernández, jefe del Comando de Zona Nº23 de Trujillo.
El declarante, a través de una misiva, expresó: “nada de esas declaraciones difundidas en este diario se ajustan a la verdad, son falsas de toda falsedad, lo cierto es que funcionarios del Conas del Zulia, como se me identificaron, después que allanaron ilegalmente la residencia de la ciudadana, a las tres (03:00 pm) de la tarde, aproximadamente, me sacan de la misma, casi desnudo maltratándome a golpes, montándome a golpes y con amenazas de muerte por el camino, en una camioneta blanca, sin identificación alguna, donde me torturaron y me taparon la cabeza, mientras dos (2) de ellos, me golpeaban, propio de los regímenes dictatoriales y sin respetar mi adultez mayor”.
Igualmente, el ciudadano detalló que deberían «es ordenar que me entreguen mis pantalones, mis botas nuevas, la correa, mi cartera contentiva de mi pasaporte, credenciales como cronista oficial del municipio Pampán y de derechos humanos, un pendrive, un carnet de la patria, un carnet de mi RIF, unas fotos mías, mis dos libretas de ahorro con sus respectivas tarjetas de crédito, mi teléfono celular, mi bolso contentivo de los expedientes de las denuncias que habían levantado de los habitantes de esa comunidad que hicieron en contra de esos organismos policiales, otra contentiva de los nombramientos míos y discursos, y otra contentiva con las denuncias que he ejercido contra el capitán Adames Rangel (…) de un pequeño bolso contentiva de mis medicinas, cepillo de peinarse, cepillo de dientes, papel sanitario, mis lentes y doscientos veinticinco mil bolívares en efectivo».
Siembra de delitos
Hernández explicó que tiene fuertes denuncias de las vejaciones de los DDHH de este cuerpo de seguridad. Además de refutar las declaraciones del general, dijo sentir indignación ante «el vulgar montaje policial de siembra de delitos, a través de falsos positivos en mi contra y que probaré ante las instancias competentes de los presuntos hechos que me endilgan, que sólo existe en la mente volátil y mágica de quienes le dieron esa información de una supuesta participación de mi persona con un grupo de sujetos armados en el sector de Cuatro Bocas de Carrillo del municipio Andrés Bello». Grupo que -según la GNB- se trata de la banda de «El Cagón», como se le conoce a Darwin Antonio Rivas Garcías (22), uno de los más buscados del país.
Delincuente que no atrapan
Sobre esto, el cronista Hernández aseguró que este cabecilla es producto de la imaginación de las autoridades. Es «sólo para justificar su inoperancia investigativa y violaciones constitucionales, están utilizando la existencia de un presunto delincuente que nunca logran aprehender, para justificar las series de atropellos que están sufriendo las comunidades de Cuatro Bocas de Carrillo, Carrillo, El Jagüito y sus alrededores. Hasta ahora suman más de doscientos ciudadanos que han denunciado estas violaciones a sus derechos constitucionales fundamentales y de Derechos Humanos, estas no sólo reposan en la comisión permanente, sino en la Fiscalía Superior de Trujillo y del Ministerio Público nacional, donde existen más de veintiséis expedientes abiertos por estos atropellos cometidos, según las denuncias por funcionarios del Conas del Zulia, Policía Municipal de Baralt, Cicpc del Zulia y de la extinta Policía Municipal de La Ceiba del estado Trujillo».