Madrid, 7 feb (EFE).- Entre el Camp Nou, con la victoria del Barcelona frente al Atlético de Madrid (4-2) para retomar la cuarta posición de la tabla, y el Benito Villamarín, con la derrota del Real Betis (0-2), tercero, ante el Villarreal, sexto, entró aún más en ebullición la ‘otra’ Liga en la zona alta de la clasificación: la pugna por dos plazas en la próxima edición de la Liga de Campeones entre cinco equipos en un margen de cinco puntos.
Mientras el Real Madrid y el Sevilla centran la pelea por el título, con el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti seis puntos por encima del bloque de Julen Lopetegui, pero mucho más lejos de los cinco aspirantes a la Champions (al Betis, tercero, lo aventaja en 13 puntos; al Barcelona, cuarto, en 15), el tercer y cuarto escalón del podio surge como un territorio abierto para cinco equipos… O más, si Athletic o Rayo son capaces de sumarse al esprint.
Para dos de ellos (Barcelona y Atlético de Madrid) es una obligación, un asunto indispensable para su economía, para cuadrar sus presupuestos, para sostener las cantidades en las que se mueve habitualmente en los mercados de fichajes; para los otros tres (Betis, Villarreal y Real Sociedad) es un aliciente formidable, la posibilidad de codearse con la elite en lo deportivo y la ocasión de multiplicar sus ingresos en lo monetario.
Un ejemplo: en el pasado curso, el Atlético ingresó 91,5 millones de euros en la Liga de Campeones, aunque no fue más allá de los octavos de final.
Eso es lo que supone entrar o no en la máxima competición europea, directa a una fase de grupos que ya de por sí ha significado esta campaña un ingreso de 14,8 millones de euros sólo por participar en ella, aparte de los premios por resultados (2,8 millones por victoria y 930.000 por empate durante la actual edición).
EL BARCELONA, EN ZONA ‘CHAMPIONS’ 20 JORNADAS DESPUÉS
En ese grupo de aspirantes, el Betis tiene una ventaja relativa. Tiene 40 puntos y es el tercero de la clasificación, pero, a la vez, ha jugado un partido más que el Barcelona, el Atlético de Madrid y la Real Sociedad, que lo persiguen por detrás. Su derrota este domingo ante el Villarreal en el estadio Benito Villamarín (0-2) es la única en sus seis últimos partidos oficiales después (tres de ellos de LaLiga Santander), mientras asoma el apasionante reto de la semifinal de la Copa del Rey.
En el espléndido momento en esta temporada del equipo verdiblanco hay matices, como ahora en la Liga. «Si los logros no se consiguen, lo hecho antes no vale», advierte Manuel Pellegrini, su técnico.
Aunque sostiene el tercer puesto, sólo ha ganado dos de sus últimos seis encuentros en ese torneo y ya siente el acecho a nada más dos puntos del Barcelona, que ha jugado un choque menos y que irrumpió este domingo en la zona de la Liga de Campeones 20 jornadas después. Desde la tercera cita del torneo no figuraba ahí. Suma 38 puntos.
Además, alcanzó el cuarto puesto frente al Atlético de Madrid, un rival directo, precisamente el adversario al que bajó de ahí con el 4-2 en el Camp Nou que equilibró la diferencia particular entre ambos en el caso de un hipotético empate a puntos al final del campeonato, una vez que el conjunto rojiblanco lo derrotó en la primera vuelta en el estadio Wanda Metropolitano, aún con Ronald Koeman, por 2-0. Eran otros tiempos para ambos equipos.
«Es una victoria muy importante. Orgulloso del equipo. Este año está siendo difícil. Volvemos a Champions. Genial», expresó Jordi Alba tras el triunfo sobre el Atlético, que sale de las cuatro primeras posiciones cinco jornadas después, aunque ese no sea el problema más acuciante del actual campeón, desfigurado una y otra vez en defensa.
EL ATLÉTICO, 2 VICTORIAS EN LAS ÚLTIMAS 8 JORNADAS… Y 16 GOLES EN CONTRA
Mientras resuelve ese problema, el conjunto de Diego Simeone, que tiene 36 puntos (dos menos que el Barcelona y cuatro por detrás del Betis, aunque con un partido menos que los verdiblancos, el que debe jugar en su casa contra el Levante el próximo 16 de febrero), ya no depende de sí mismo.
Queda mucho todavía para revertir una situación que ya sufrió en 2019-20, aunque finalmente agarró la tercera plaza por su reacción en las once citas finales (nunca ha bajado del podio al final del campeonato desde 2012-13), pero sus resultados no se corresponden actualmente con esa posibilidad: ha ganado sólo dos de sus ocho encuentros más recientes de la Liga, ha recibido 16 goles en ese tramo (un promedio de dos por jornada) y es un equipo que viaja a la deriva, sin encontrar el nivel que exhibió hace menos de un año en la Liga.
A la pugna, además, se ha sumado el Villarreal, por su triunfo contra el Betis y porque viene lanzado desde abajo hacia arriba. Ahora con 35 puntos (a tres de la cuarta plaza del Barcelona, aunque tiene un choque más que el propio conjunto azulgrana, el Atlético de Madrid y la Real Sociedad entre los oponentes directos por esas dos posiciones). El equipo de Unai Emery ha vencido seis de sus ocho duelos ligueros más recientes. Solo perdió uno.
LA AMBICIÓN DEL VILLARREAL, LA PRUDENCIA DE LA REAL SOCIEDAD
«El Betis marca el puesto al que queremos llegar», proclamó Pau Torres, el central internacional, transformado en un goleador en las últimas cinco jornadas, en las que anotó tres tantos. «Queda Liga y hay muchos equipos luchando por la tercera y cuarta plaza», asumió Unai Emery, con los mismos puntos que el quinto equipo inmerso en la carrera de 15 jornadas para definir esos puestos en la Liga de Campeones: la Real Sociedad.
Este domingo empató sin goles con el Valencia. Su segundo 0-0 consecutivo. El conjunto donostiarra nada más ha ganado en una de las nueve jornadas más recientes. Ha logrado siete de los últimos 27 puntos, aunque se mantiene invicto en las cuatro últimas citas, con tres empates y un triunfo. Su irregularidad lo ha rebajado al séptimo lugar actual, aunque, como el Atlético y el Barcelona, también tiene un aplazado pendiente, ante el Mallorca.
«Cuando no puedes marcar es importante no encajar y hay que dar importancia a este empate ante un rival (el Valencia) que está en semifinales de la Copa del Rey y que es un rival directo por estar en la próxima Liga Europa», expuso su técnico, Imanol Alguacil, aunque la Liga de Campeones sea hoy por hoy un objetivo posible para el conjunto donostiarra.
SIETE DUELOS DIRECTOS Y MÁS DE 70 PUNTOS PARA IR A LA LIGA DE CAMPEONES
Para alcanzar la meta de la Liga de Campeones, según marca la historia más reciente de LaLiga Santander, contando las cinco últimas temporadas, el que quiera ser tercero necesitará entre 68 y 79 puntos, aunque todo apunta a una cantidad más cercana a la segunda que a la primera. El tercero de la pasada campaña (el Barcelona) sumó 79; el de 2019-20 (Atlético de Madrid), 70; el de 2018-19 (Real Madrid), 68; el de 2017-18 (Real Madrid), 76; y el de 2016-17 (Atlético), 78.
Quien desee ser cuarto, su cálculo pasa por una horquilla entre 61 y 77 puntos, aunque también se prevé que será una cifra más cercana a la segunda que a la primera. En las últimas cinco Ligas, en cuatro de ellas hizo falta 70 o más puntos para ser cuarto, con la única excepción de la campaña 2018-19, cuando el Valencia fue cuarto nada más con 61. El Sevilla necesitó 77 el pasado curso, 70 en 2019-20 y 72 en 2016-17. Y el Valencia, 73, en 2017-18. Entre esos números se moverá la última plaza de acceso a la Champions la temporada que viene.
Es una cantidad exigente, que limita el margen de error para cada uno de los pretendientes a falta de quince jornadas (dieciséis en el caso del Atlético, el Barcelona y la Real Sociedad), con aún siete duelos directos por jugar: Betis-Atlético de Madrid, Real Sociedad-Betis, Real Sociedad-Barcelona, Betis-Barcelona, Villarreal-Real Sociedad, Real Sociedad-Atlético de Madrid y Barcelona-Villarreal, estos dos últimos en el capítulo final del campeonato.
Iñaki Dufour