A propósito de celebrarse este 15 de enero el día del maestro en Venezuela, el secretario general de la Alianza del Lápiz en el estado, Jesús salcedo, denunció que los docentes criollos viven la peor semana del educador que se haya registrado en la historia del país, debido a las precarias condiciones de trabajo, entre los que destacó los “sueldos de hambre” que devengan y que no cubren ni siquiera el costo del pasaje para los formadores de las generaciones futuras.
El portavoz del partido de la educación, reiterando que los maestros venezolanos son héroes que se mantienen en resiliencia en las aulas de clases, enumeró entre las vicisitudes que hoy atraviesan los profesores, los bajos salarios que rondan entre $1,5 y $5 dólares al mes.
“¿Cómo lleva el pan a su casa un maestro cuándo recibe migajas por el trabajo realizado? Hoy nuestros maestros son los peores pagados de toda Latinoamerica”, reflexionó.
Cómo ejemplo de esto, citó el caso de un docente tipo II en el estado Táchira, cursante de doctorado, que cobra menos del salario mínimo. “Les violaron su contratación colectiva “aplanando” las tablas salariales de la administración pública, le robaron sus beneficios laborales dejándolos sin seguros de HCM ni funerario y les pulverizaron sus pasivos laborales”.
Es así que hoy los educadores siguen, dando ejemplo, en pie de lucha en todo el territorio nacional y no escapa nuestro estado en cada uno de sus rincones, a través de las manifestaciones, reclamando su justo derecho a salarios dignos, precisó.
Por otro lado, Salcedo manifestó que estos maestros cuyos sueldos no les alcanza ni para costear el precio del transporte público y que muchas veces les toca trasladarse en las denominadas perreras o largas distancias a pie, enfrentan en las aulas de clases la peor cara de la pérdida de valores engendradas durante estos años de revolución.
“Tenemos maestros luchando con grupos hamponiles que le vacían los salones de clases, que a diario luchan para evitar que la generación de relevo abandone el aula de clase para formar parte de la banda delincuencial del sector”, añadió.
En este mismo orden de ideas, cuestionó las complicadas condiciones de trabajo que padecen a diario los profesionales que persisten en los salones de clases por el acelerado deterioro de la infraestructura escolar. Sobre este tema en particular y reiterando que en Venezuela hace años que no se inaugura una escuela, puntualizó, que los educadores pasan meses, años, sin luz ni agua en sus sitios de trabajo.
Se ha podido constatar la paralización casi absoluta a nivel nacional del Programa de Alimentación Escolar, aseveró tener información de instituciones en nuestro estado, donde prácticamente todo el año escolar, y esto por colaboración de madres procesadoras, han servido solo arroz y lenteja a la comunidad educativa.
En contraposición a este complicado panorama, manifestó estar confiado en que los maestros serán la columna vertebral, con su ejemplo y dedicación, de la reconstrucción que viene para Venezuela e invitó a toda la colectividad a acompañar a los docentes en sus justas luchas por las reivindicaciones laborales, las cuales manifiestan día a día en cada uno de nuestros municipios del estado.