Isnotú un pueblo de fe / Por Pedro Frailán

Sentido de Historia

 

 

Isnotú un pueblo trujillano fundado en 1645 y que su nombre se inspira en el de una quebrada, hoy es una parroquia civil del municipio Rafael Rangel que comprende una de las 93 parroquias el estado Trujillo y al mismo tiempo  una de las 1136 que conforman el territorio nacional. Pero en este lugar, existe una expresión, sentimiento poco común que pueda apreciar en cualquier lugar como lo es la fe, que es una fuerza espiritual teológica, dogmática y al mismo sagrada aquí se concentran tres elementos fundamentales del cristianismo como lo son: esperanza, fe y obras.

La fe según los Hechos de los apóstoles es cuando Pablo y Silas están presos, el carcelero les pregunta que debe hacer para salvarse y le dicen: (Hch. 16, 31 – 32) “Ten fe en el Señor Jesús y te salvaras tú y tu familia. Y la anunciaron la Palabra del Señor a él y a todos los de su casa”.

En la Carta a los Hebreos, en el capítulo 11 de los versículos del 1 al 40, reseña la historia de la fe del Antiguo Testamento partiendo desde: Abel pasando por Henoc, Noe, Abraham, Sara Isaac, José, Moisés, Job, Rahab, Gedeón, Barac, Sanson, Jefté David, Daniel entre otros. En el Nuevo testamento la obra de fe más grande fue, la de María ante el Ángel Gabriel, reseñado en el primer capítulo del evangelio de San Lucas.

Lo grandioso de Isnotú, es que es un lugar de fe, la patria chica del Dr. José Gregorio Hernández, el Siervo de Dios, que nació un 26 de octubre de 1864 y vivió 55 años. Trascendió a la muerte, para recobrar vida hoy es el venezolano de mayor, sentimiento y querencia de la pasión venezolana, porque está sembrado, en la Venezuela viva. Es una imagen de la venezolanidad, es un símbolo de ciudadanía, de santidad, de profesionalismo.

Es nuestro santo sentimental decretado por un pueblo ansioso de esperanza y fe. Ojala que con su beatificación encarne la unidad de los venezolanos, recordemos al evangelio de Lucas, cuando dice: (Lc. 1, 37). “Que para Dios nada es imposible”.

Isnotú puede ser un lugar líder de la fe en el país, puede convertirse en un Lugar de la Mancha, así como México desde la literatura mira hacia Comala, Colombia a Macondo, Venezuela hacia Isnotú. El Dr Hernández tiene encuentros íntimos que son: La Esquina de Amadores en la Parroquia la Pastora, lugar donde tuvo el accidente, la Iglesia la Candelaria en la parroquia del mismo nombre donde reposan sus restos a partir de del año 1975, en Caracas.

Pero la mirada fuerte es hacia el pueblo andino de Isnotú, que tiene dos grandes fortalezas una es el pueblo con 376 años de historia y un personaje con 157 años, resguardado en el alma de los venezolanos. ¿Qué hacer?, para lograr ser una puntera de espiritualidad nacional, pues mirarse hacia adentro, a su historia, sus tradiciones, costumbres, relatos, creencias, arte culinario, mitos. “Conoce a ti mismo” dijo: Sócrates. Son sus habitantes los responsables de conducir su propio destino de ello depende el éxito o el fracaso.

En muchas ocasiones, parece redundante mirarse sobre su propio destino, puede verse fastidioso pero no se puede conquistar a otro si no conoce sus valores, sus encantos, sus ilusiones y por supuesto conquista con la fe enraizada en el Dr. José Gregorio Hernández. Venezuela entera tiene una ilusión religiosa, así como Nipona tiene su propio santo San Agustín. Loyola a san Ignacio, Lima a Santa Rosa, Venezuela desea, quiere, ilusiona tener a San José Gregorio de Isnotú, sigamos pidiendo que a Dios, a él le gusta que seamos constantes en la fe.

 

José Gregorio Hernández

desde Isnotú a Mangas Coveras

 

El día lunes 29 de junio de este año frente a esta dificultad critica como lo es la pandemia del Corona Virus. Nos encontramos una vez más en Isnotú en el Santuario del Niño Jesús, en donde se venera al Dr. José Gregorio Hernández.

Pero en esta oportunidad un día tan grande para la iglesia Católica como lo es el día; de San Pedro la piedra angular de esta iglesia y de su gran predicador como lo fue San Pablo. Ese día también recordamos los 101 años de la muerte del Dr. José Gregorio Hernández. Pero en esta oportunidad, con la alegría nacional de un sueño hecho realidad su BEATIFICACIÓN.

Beatificación que oficialmente nos la dieron a conocer un día, también muy grande para la Iglesia Católica como lo es el 19 junio día del Sagrado Corazón de Jesús y el siguiente 20, el de inmaculado Corazón de María. Así es que José Gregorio Hernández, en estos días está entre santos. Santos como lo que es él, que tenemos que seguir luchando para su canonización con la fuerza impulsada por Dios y la luz del Espíritu Santo.

Fue un encuentro grande ameno, pero al mismo tiempo íntimo, amoroso, sencillo que estábamos en la búsqueda de Dios por la intersección del Dr. José Gregorio Hernández desde su aldea que lo vio nacer en 1864. Con la presencia del Sr. Obispo de la Diócesis de Trujillo Oswaldo Azuaje P. el Padre Magdaleno Álvarez Rector del Santuario y su cuerpo eclesiástico.

El Sr. Gobernador del Estado Trujillo Gral. Henry Rangel Silva su comitiva y parte de la ciudadanía. Nos llamó mucho la atención las palabras del Sr. Obispo cuando dijo: “Queremos muchos a “José Gregorio Hernández, pero tenemos que conocerlo más. Para quererlo más, un santo laico de a pie devoto de San Francisco de Asís”. Fue un momento de hospitalidad de paz de sentimientos de la trujillanidad.

Ya eran 71 años de espera por este día, desde que Monseñor Lucas Guillermo Castillo Arzobispo de Caracas iniciará el proceso de beatificación y canonización en tiempo de Pio XII en 1949. Luego a los 23 años en 1972, es cuando Paulo VI lo declaro Siervo de Dios. Más adelante en 1986 fue revelado como Venerable por Juan Pablo II. A los 33 años después Beato por el Papa Francisco ha valido la pena esperar y seguimos avanzando sin perder el ritmo para la canonización.

Grandioso José Gregorio Hernández, justamente desde su aldea, en Isnotú que lo vio nacer. Nos comenta Monseñor Jorge Villasmil, que en la entrada del santuario en donde está la estatua de mármol fuel el lugar donde él nació. Justamente, ¡qué cosas de la vida!, que su revelación con el permiso de Dios se manifestó por medio de un milagro, en una aldea del siglo XXI, en Mangas de Coveras, Municipio San Jerónimo del Guayabal Estado Guárico. En una familia humilde, igual que a su hija Yaxuri Solorzano Ortega. Sin duda alguna que esto no es un acto humano, es un acto divino, que sólo le corresponde a Dios.

Los medios de comunicación participaron activamente, andan en este peregrinar con mucha fe, con mucha esperanza en busca de la luz, inspirado en la encíclica Lumen Fidei de Benedicto XVI y Francisco.

Caminante no hay camino, se hace camino al andar… de Don Antonio Machado.

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