No se puede negar el éxito de la alcaldesa Iroschima Vásquez por el desalojo de buhoneros del centro y alrededores de Valera, como también de la recolección permanente de desperdicios en toda nuestra entidad, negar este su logro, seria mezquino y poco serio a la vez. Ciertamente la joven burgomaestre se “arremango” los pantalones y de un solo “guamaso” pirilin,pirilin reubico de una a tanto informal que ya tenían colapsada la ciudad. A saber que esta actividad es gran generadora de desperdicios menudos, material orgánico que de “apocon” se aprecia en cualquier esquina de la urbe. Asimismo se sabe lógicamente que para lograr tal hazaña la alcaldesa conto con el apoyo unánime de todas las fuerzas policiales acantonadas en nuestra región, es decir, como debe ser cuando en un espacio reina la anarquía. Por supuesto que todo este accionar lleno de alegría y tranquilidad a coterráneos y extraños, porque de “pana” transitar en días pasados por el centro de Valera “uff” era sinónimo de que te “amasaran” las nalgas sopotocientas veces y si se trataba de mujeres, obvio, el doble. Ah! Y si por mala suerte te topabas con las flacas manos de seda, te “jodiste” adiós cobritos y carterita. Incluso, a veces había que caerse a “coñazo” limpio para lograr el objetivo básico como era caminar en paz o lo más sencillo como cruzar la via. En fin, era un total despelote deambular por cualquier calle de nuestra querida Valera. Actualmente la caminamos “fino,fino, fino”, peeero lastimosamente me he percatado que poco a poco se han estado agrupando algunos trabajadores informales en determinados sitios de la ciudad, ah! Con anuencia de la gendarmeria que ronda por el sitio. Se entiende que la cosa esta harto difícil y esto es para “tutilimundi”, peeero volver a esta pesadilla del caos que se vivía en Valera por años, dios mío, no puede ser permitido, Ojala y esté equivocado peeero veo mucho movimiento con este fin, y como les dije sería volver al desorden, a la barbarie, al sucio “parejo”, a la anarquía, en fin a todo lo perverso que implico la experiencia que se vivió en las calles de nuestro terruño. Estimada alcaldesa; le rogamos que por amor a Dios y a la patria que la vio nacer, no permita que el caos se apodere nuevamente de nuestras calles. La ciudad le estará eternamente agradecida por su valiente decisión de reubicar a estos trabajadores. Ahora bien; ¿acaso no tienen un sitio donde laborar?, que es bien grande y bien céntrico, ¿no era eso lo que exigían?. Iroschima esperamos por usted, en sus manos esta detener este desbarajuste antes que se produzca… y no olviden, la gracia de Dios es eterna
Iroschima ¿Vuelven las fritangas?
En comunidad se vive mejor
Fuente:
Omar Sánchez Delfín
