Ya no constituye sorpresa ni asombro para los conductores tanto del servicio público como particular, que las estaciones de servicio estén cerradas o que se esté haciendo colas de hasta 5 horas esperando que llegue el combustible, no hay para donde tomar el depósito de combustible para el vehículo está seco y lo mejor es esperar para no quedarse en medio de la vía, resignación de los que sufren las consecuencias de las escasez de gasolina, que ayer en el eje panamericano se hacía sentir una vez más.
En horas de la mañana en Betijoque las dos estaciones servicio estaban cerradas no había gasolina, en Sabana de Mendoza. Los Silos no tenían gasolina, San Alejo si, igual sucedía en El Dividive; Buenos Aires tenía gasolina con una inmensa cola, Chiquinquirá no, similar situación se observaba en Sabana Grande y si se toma de Agua Viva en Adelante la situación es similar, en la mayoría de las estaciones de servicio falta el combustible que hace rodar los vehículos.
Para completar los apagones de Corpoelec están a la orden del día, ayer en Betijoque se sucedieron más de 5 bajones y dos apagones lo que castiga a neveras, y demás útiles imprescindibles en el hogar y de alto costo en la actualidad.
Queja y más quejas
A las fallas de combustible para unidades automotoras, hay que añadir la escasez de gas licuado para uso doméstico, vendido en la zona a precios inalcanzables, sobrando quejas por la inseguridad que se vive en la zona, donde el campeón es el Municipio La Ceiba, pues hasta el Lago es una selva donde abundan las bandas de malvivientes, que se apropian de los motores fuera de borda, y que tiene en la ruina a los pescadores que todos los días salen en busca del sustento para ellos y sus familias.