Para variar las colas ayer en Isnotú y Betijoque no era para adquirir harina precocida, pollo, carne, pasta o arroz. Las inmensas colas que se observaban en el callejón donde está ubicada la sede de la Alcaldía y el puesto policial de Betijoque 3.3, eran para que les expidieran la cédula de identidad.
Muchos de los que solicitan este imprescindible documento, son jóvenes que carecen del mismo, unos que lo sacan por vez primera y otros porque lo han extraviado, todo es válido cuando se piensa viajar lejos, más los jóvenes que no consiguen trabajo en ninguna parte y si encuentran es por un salario que apenas alcanza para comprar un kilo de queso y medio kilo de carne, tal como dijeron muchos de los que iban en la cola. Crece la diáspora, la busca de nuevos horizontes, por el mal gobierno que tenemos en el país.