Yakarta, 26 dic (EFE).- Con diversas ceremonias religiosas, Indonesia recordó este lunes a las miles de personas que perdieron la vida durante el tsunami que hace hoy 18 años arrasó las costas de 15 países bañados por el océano Índico en los que golpeó.
A las 8 de la mañana del 26 de diciembre de 2004 un terremoto de magnitud 9,1 frente a las costas de la isla indonesia de Sumatra produjo un tsunami que se cobró la vida de 230.000 personas, la mayoría de muertos en la provincia indonesia de Aceh.
Las autoridades de Aceh, policía indonesia y asociaciones locales de pescadores, entre otros grupos, convocaron oraciones en memoria de las alrededor de 170.000 víctimas mortales que dejaron en Sumatra las olas gigantes, algunas de hasta 30 metros de altura.
«La tristeza y el dolor están todavía muy presentes en la gente de Aceh (…) Hagamos del memorial del tsunami de Aceh una lección y un detonante para lograr un futuro mejor. Para que Aceh pueda levantarse más fuerte con una cultura de concienciación para (la mitigación de) desastre», apunta el Servicio de Transporte de Aceh en su convocatoria del evento.
Los pescadores de Aceh, donde en 2019 se declaró el día festivo, un año más los pescadores fondearon sus botes durante el aniversario en señal de respeto.
«Celebramos rezos en cada subdistrito (de Aceh) para recordar a los mártires», indicó a EFE Badruddin Yunus, director de la asociación de pescadores local Panglima Laot.
Banda Aceh, capital de la provincia de Aceh y «zona cero» del tsunami, quedó totalmente arrasada y solo un puñado de edificios permanecieron en pie tras el envite, ente ellos la mezquita de Baiturrahman que se ha convertido en lugar de peregrinación y rezos de familiares de las víctimas y supervivientes.
La catástrofe en esa parte de Indonesia fue de tal magnitud que determinó la firma de la paz entre la guerrilla independentista musulmana y el Gobierno, tras décadas de lucha armada.
Un fuerte seísmo formó el tsunami en Indonesia y este atravesó el Índico y causó muertes en 14 naciones, algunas tan distantes del archipiélago indonesio como Somalia, Kenia, Tanzania o Sudáfrica.
Las naciones más afectadas fueron Indonesia, con 170.000 muertos y desaparecidos, la gran mayoría en el norte de las isla de Sumatra; Sri Lanka, con 30.000; la India, con 16.000; y Tailandia, con 8.200.
En la turística playa tailandesa de Khao Lak, en el oeste del país y cerca de la popular isla de Phuket, unas 300 personas acudieron a primera hora de la mañana a una ceremonia interreligiosa en el memorial de Ban Nam Khem para las víctimas del desastre.
Algunos de los asistentes, entre ellos familiares de las víctimas, depositaron ofrendas florales, mientras monjes budistas y representantes católicos y musulmanes realizaron cantos y oraciones