Importantes sectores de la parroquia Sabana de Mendoza, capital del municipio Sucre, continúan padeciendo una grave escasez de agua potable que se agudizó durante los días de Semana Santa. Según habitantes de las comunidades afectadas —entre las que destacan Inavi, San Alejo, El Toro, Los Ángeles, Los Próceres, Santa Eduviges y el casco central— la interrupción del suministro se debe al fallo en la estación de rebombeo ubicada en El Jabillo. El problema fue causado por la quema de uno de los tres transformadores de 100 KVA que operan en dicha estación.
Sin solución inmediata
A pesar de las expectativas de que Corpoelec abordara la emergencia reemplazando el transformador dañado, hasta la fecha la situación persiste sin avances visibles. Ante la desesperación, muchos vecinos se vieron obligados a adquirir agua mediante camiones cisterna, cuyos costos oscilan entre 7 dólares por cada mil litros y 15 dólares por 2 mil litros, precios que no todos pueden costear. Algunos afectados, bajo reserva de su identidad, manifestaron públicamente su inconformidad y denunciaron la falta de acción de las autoridades.
Falla técnica sin reparación
La avería en el Banco de Transformación de El Jabillo, que culminó con la explosión de uno de los transformadores, ha paralizado el bombeo de agua hacia las comunidades. Los vecinos recalcan que la solución es factible mediante la instalación de un nuevo transformador que sustituya al equipo quemado, pero el retraso en las reparaciones agrava el impacto en la calidad de vida de cientos de familias.
El llamado de los habitantes es claro: se necesita atención inmediata para restablecer el servicio y garantizar el acceso al agua, un recurso vital para todos.
