La profesora Marisol Urbina celebra 42 años de actividad en el mundo de la danza, y que junto a su gran creación: Escuela de Danzas Caribay, recogen los mejores frutos productos de una cosecha bien llevada, a la cual se le ha dedicado tiempo y espacio.
Marisol Urbina es parte de un gran legado cultural, dancístico, profesora formada con los máximos honores en el Instituto Nacional del Folklore en la ciudad de Caracas, y ha sabido compartir todo ese bagaje y conocimiento adquirido con su terruño, con su gente, formado a más de cuatro generaciones sin descanso. Marisol y su Escuela se han dedicado por entero a formar, enseñar la danza a través de proyectos e investigación del significado de este tipo de bailes en el país.
La profesora Marisol y su Danzas, nos hacen recordar que, somos pueblo de grandes cultores, de exquisita cultura y la danza es parte de ese rico folklore regional que hemos heredado de nuestros indígenas.
Hay que decir que Marisol Urbina pertenece al grupo selecto que surgió de la mano de Gladys Mota, quien seguramente aprendió con exactitud todos los movimientos, el desarrollo y la pedagogía para la enseñanza. Fue una alumna aventajada al igual que el resto de sus compañeros de curso. Se mantuvo con la profesora Gladys entre los años 1972 y 1980 como alumna y bailarina de la Escuela de Ballet, Danza y Folklore.
Esta loable tarea de Marisol y sus proyectos tiene su génesis entre los 1980 y 1983 cuando asume la dirección de la Escuela de Danza del Ministerio de la Juventud en Valera.
Sus inquietudes por esta actividad y la preocupación de hacer algo más efectivo por la danza local, la lleva a crear las Danzas Miranda la cual funcionó por muchos años en el club Francisco Miranda en Plata 2. En el año 1982 cambia de nombre a Danzas Folklóricas Caribay y más tarde se identifica como lo que es hoy día, Escuela de Danzas Caribay.
Se siente bendecida
Marisol Urbina con su Escuela Danzas Caribay ha sabido resaltar los géneros de la danza nacionalista, moderna y folklórica entre otras modalidades que le inculcan a su alumnado desde los 4 años. Manifiesta sentirse bendecida “Por el don que Dios me dio, y poder continuar mi labor de enseñanzas de la danza, me enorgullece los logros de mis pupilos, estoy muy agradecida de mi hermano Luis, Marianela, hermanos Orozco, Hortensia Godoy, El “Abuelo”, María Eugenia García y a mi maestra Gladys Mota motivación e inspiración para seguir danzando”.
Alfredo Matheus amigo y admirador de Marisol Urbina, también dejó expresado su sentir por esta celebración cultural, “Es un Libro viviente de la cultura trujillana, patrimonio artístico de la ciudad de Valera, cultora popular, alma humilde y sencilla. Marisol ha cultivado el quehacer dancístico en centenares de niños y jóvenes trujillanos. Se ha caracterizado por ser, eterna defensora de los bailes folklóricos de nuestros pueblos. Gracias por todo ese maravilloso aporte que le ha dado a la Danza de Trujillo y Venezuela, la ciudad de Valera y su gente se lo agradece”.
Luis Urbina, hermano de la profesora Marisol muestra su orgullo por la trayectoria de su hermana, “Ella como docente y maestra de danza , bailarina y coreógrafo, fue creando su escuela con mucho sacrificio y trabajo, por sugerencia del cronista cultural Alfredo Matheus se comienza a llamarse Danzas Caribay folklórica, más tarde en 1990 se formaliza como Escuela de Formación CSRIBSY. Han sido varias las generaciones de artistas que se han capacitado con Caribay y la maestra Marisol. Hoy sigue en pie, con el firme propósito de renacer en su trabajo formativo y artístico celebra sus 42 años de exitosa labor socio-artístico y cultural, representado la cultura Trujillana por casi toda Venezuela. Llevando la Danza folklórica, nacionalista y el baile popular creativo”.
Por su parte Rossy Toro ha señalado, que tanto Marisol Urbina como Danzas Caribay, son patrimonio vivo de las cultural del estado Trujillo y Venezuela, “Toda una escuela. Mis respetos y Admiración por tanta entrega por tanto orgullo por nuestros logros”.
“Millones de bendiciones y que siga la cultura, los bailes, las enseñanzas para nuestro pueblo Valera y el estado Trujillo. Orgullosa de mis raíces y sobre todo Venezuela un país noble y de gente hermosa y de una altísima calidad humana. Infinitas felicitaciones a Marisol Urbina, a la Escuela Danzas Caribay. Me siento orgullosa de haber pertenecido a la Escuela Gladys Mota y luego a las danzas del Ministerio de la juventud y aquí seguimos”, testimonió Yuly Sánchez.
Perseverancia y dedicación
El trabajo constante, la perseverancia y dedicación le fueron dando el empuje para desarrollar la institución, los reconocimientos no se hicieron esperar, y en un abrir y cerrar de ojos, ya Marisol Urbina y Danzas Caribay se había constituido en una de las fuerzas culturales de Valera. El sello que certificó su auge se consigue a finales de los años 80, cuando logra establecer un lugar en nuestra urbe, se instalan en el muy recordado sótano municipal, un recinto que guardia mucha historia, de allí el proyecto comienza a tomar forma y se fortalece, no fue fácil, el trabajo fue arduo, muy duro, sobreponerse a muchos obstáculos y algunas carencias, pero más pudo el interés, las ganas y el empeño que todo su grupo le puso en favor de un objetivo: hacer de la Escuela Danzas Caribay una referencia local, regional y nacional.
Para el año 1989, Marisol incorpora en el proyecto a su hermano, Luis, un joven con gran talento en cuanto a la danza clásica, contemporánea y artística. Un cultor artístico en potencia.
Esta gran familia que conforma la Escuela de Danzas Caribay merece toda la consideración de su gente, de su pueblo, que los ha visto crecer, de esta Valera por la cual se esmera todos los días con gran dote de mística, disciplina y responsabilidad.
Luego de trascurrir más de cuatro décadas de aquel inicio de camino, debemos con el mayor de los respeto, admiración, ofrecerle el mejor reconocimiento a esta iniciativa de Marisol Urbina. Excelente desde todo punto de vista.
Sus actuaciones y presentaciones reciben los mejores elogios y los más rotundos aplausos, todo gracias a la dedicación, al trabajo incansable, al empeño de hacer las cosas cada día mejor, siempre en busca de enaltecer el gentilicio de este lar, en hacer que la cultura siempre esté por encima de cualquier circunstancia. Aplausos de pie para usted profesora y para todo su grupo.
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Elvins Humberto González
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