“Votando en la tarjeta del gallo rojo, el pueblo enviaría un claro mensaje de profundización del proceso, sería algo así como ‘Te apoyamos Maduro, pero aplica el programa de los comunistas’” argumenta Gregorio Rincón, dirigente regional comunista
Diana Paredes/CNP 13.379
Votar por la reelección del presidente Nicolás Maduro en la tarjeta del Partido Comunista de Venezuela (PCV), la tarjeta del gallo rojo, es una forma de ejercer el voto protesta, para exigir la ansiada profundización revolucionaria. Así lo define la dirección regional de los comunistas trujillanos, la cual insiste que para el 20 de mayo sufragar en su tarjeta “servirá para rechazar la agresión multifacética del imperialismo norteamericano y europeo contra el pueblo venezolano, y la amenaza cierta de una dolarización que sería catastrófica para la clase trabajadora y campesina, aún peor para la actual hiperinflación”.
Estas declaraciones las hace Gregorio Rincón, dirigente regional comunista, quien además aseguró que «no hay partido más crítico, más autónomo y propositivo que el PCV. Por eso, renovamos nuestro llamado al chavismo crítico, al chavismo descontento, para que en lugar de abstenerse, exija, decidiéndose a votar por Maduro en la tarjeta del gallo rojo. Una porción de las bases opositoras también se van a abstener, y la única forma que tendrán los chavistas molestos de diferenciarse de esos opositores molestos, será el sufragio en la tarjeta del gallo rojo” sentenció.
Programa
“Muchos se preguntarán que votar por Maduro en cualquier otra tarjeta es lo mismo. Y no lo es, porque nuestra diferencia está es en el programa, el cual es exigente. Y las propuestas comunistas van direccionadas a atender lo económico-estructural: La nacionalización total de la banca para acabar con la fuga de divisas, la extracción del bolívar y el lavado y legitimación de capitales; la nacionalización del comercio exterior para establecer una central estatal de las importaciones que restrinja el otorgamiento de divisas a los importadores privados que han descapitalizado a la República y consolidado el rentismo y la dependencia” argumentó el integrante del gallo rojo.
Continuó “además de ello, instaurar un régimen tributario progresivo que traslade el peso de la carga impositiva a los grandes capitales, a las actividades especulativas y el consumo suntuoso; incrementar las tasas del Islr a las personas jurídicas y grandes contribuyentes, pechando las ganancias súbitas y excesivas así como las tierras y bienes de capital ocioso y subutilizado; la eliminación progresiva de impuestos al consumo popular como el IVA; la supresión de todo mecanismo de evasión impositiva por parte de los capitalistas y fundamentalmente la eliminación de los tratados contra la doble tributación”.
Con el PCV se profundiza el proceso
“Desde el PCV insistimos que para superar la aguda crisis del capitalismo venezolano rentista y dependiente es necesario se reorganice y disciplinen las finanzas públicas, estableciendo criterios de racionalidad, equilibrio, eficiencia y orden en el manejo del presupuesto nacional y en la administración del tesoro, amén que las empresas del Estado estén bajo el control y la dirección de la clase trabajadora” dijo Rincón.