Hace 40 años se iniciaba en el oficio fotográfico de la mano de su padre. Desde entonces se fue destacado por su visión clara y concisa de los acontecimientos a plasmar en una foto para una reseña periodista.
Casi desde su fundación estuvo ligado a Diario de los Andes, su casa por siempre, en donde su trabajo fue reconocido y distinguido con el premio Germán González como el mejor gráfico. Para quienes hemos laborado por muchos años con Goyo, sentimos profundamente su fallecimiento, una gran pérdida para la familia periodística trujillana.
Con dolor le recordamos como eje fundamental en nuestra sala de redacción donde fue pieza de suma importancia para cada uno de sus compañeros de trabajo por sus dotes de amigo y maestro. De él aprendimos el difícil mundo del periodismo, el momento de captar la mejor imagen que representará la noticia en todo su esplendor.
Su trabajo despertaba la admiración de todos. Respetado y querido por sus colegas y amigos. De Goyo destacamos muchos sus dotes de compañerismo y de su olfato en materia informativa.
Quienes a diario compartimos con él por tantos años certificamos su compromiso, lealtad, disciplina y sobre todo responsabilidad. Hombre respetuoso, puntual, siempre era el primero en llegar…
Despedirlo hoy es doloroso, hoy toda la familia DLA está triste, afligida por tener que decirle adios a un gran compañero de labores, pero mejor persona, y sobre todo amigo leal.
En la sala de redacción te recordaremos por lo grande que fuiste, por su alegría y buen humor, por ese don de gente que siempre dejabas al descubierto con tu sonrisa y en tus acciones… Hoy Dios te recibe con los brazos abiertos como premio por haber cumplido con exactitud la misión asignada. Hasta siempre amigo…
Elvins Humberto González