Los valores son principios que nos permiten orientar nuestro comportamiento en función de realizarnos como personas.
Son guías que nos dan determinada orientación a la conducta y a la vida de cada individuo y de cada grupo social. El valor se refiere a una excelencia o a una perfección.
El valor de la gratitud… Es el tema de hoy en Valores, Ciudadanía y Cotidianidad. El ser agradecido muy saludable para el alma del humano, es en definitiva un valor de gratitud el cual se fortalece cuando logramos asumirlo a diario. Esto significa: que, como seres humanos no debemos nunca guardarnos “las gracias”, sino todo lo contrario, hay que expresarlo a diario y aprovechar cada momento que nos regala la vida para hacerle saber a las demás personas nuestra gratitud por haber contribuido a sobrellevar, de alguna manera, nuestro diario existir.
La palabra ‘gracias’ es muy sencilla, profunda, emotiva, y que al igual que la sonrisa sabe alegrar el alma de todo individuo, llega a los corazones de todos con una expresión tan premiable como ella.
Cuando más agradecidos seamos y aprendamos a serlo correctamente, cada momento de nuestras vidas será mejor, pero también nos permite a valorar más lo que somos, lo que hacemos y como lo hacemos. Ser agradecido nos hace ser en definitiva más felices.
Divulgar el agradecimiento
Monseñor José Ángel Divasson, ex director de los Salesianos de Valera, dice que, la gratitud no es “pagar” un favor recibido: “En mucha ocasiones no se le da la lectura adecuado a ciertas cosas, en el caso de la gratitud hay que decir: que se ejercer como el valor a una persona a la cual se le expresa aprecio y reconocimiento por haber presta alguna ayuda. Pero eso no significa, que, la gratitud es un “pago” por un favor recibido, eso es erróneo, la gratitud es la demostración de afecto para retribuir algo de forma afable, y que podemos llamar como una actitud positiva del ser humano ante los hechos, y circunstancia de la vida. La gratitud no solo es individualmente, también lo es colectivamente.”
El prelado hace un llamado para que nunca dejemos de dar las gracias, “es una palabra tan simple y hermosa y que no cuesta nada con divulgarla, que al hacerlo nos llueven bendiciones, nos llenamos de espiritualidad. En la vida hay que saber ser agradecido, pero no hacia adentro, hay que expresarlo hacia a fuera, con fuerza, ganas y convicción. El agradecimiento debemos de manifestarlo desde que nos levantamos y llevarlo con nosotros durante todo el día. Es muy bonito hacerle saber a nuestra familia, amistades y compañeros lo agradecido que estamos de ellos, pero igualmente es de suma importancia para el ser humano, estar agradecido y de dar gracias a Dios por la vida, por la respiración, por lo que somos y hacemos, por lo bueno y lo malo, por todo lo que nos rodea. Gracias es amor, y el amor se agradece”.
Acto de humildad
Ser agradecido se puede calificar como un acto de humildad, un gesto sublime para corresponder a otros. La gratitud es un sentimiento y efecto que, ennoblece a la persona por sus acciones en favor de otros que a diario buscan ofrecer bienestar y colaborar con servicio, dedicando tiempo y espacio que con pequeños detalles contribuyen a una mejor cotidianidad.
La doctora Erika Romero señala que, todos creemos saber qué es ser agradecido. Creemos que sentirnos agradecidos o “dar gracias” es un acto que se limita a “ser educados”. “El agradecimiento, sin embargo, va más allá de esas expresiones de educación o de saberse en deuda por algo que alguna persona hizo por nosotros. Se trata, en realidad, de tener en cuenta que muchas veces esos sucesos, grandes o pequeños, que nos acarrean un bienestar físico o emocional, los debemos a alguien que hizo algún sacrificio y que, por pequeño que este sea, salió de lo más profundo de su corazón”.
Gratitud es
ejercer una
mejor ciudadaníaLa gratitud exige que haya un sistema de valores éticos, en donde estén resueltos los conceptos de dar y recibir, además de una renuncia a la visión egocéntrica de la vida. Es de los valores más humanos, resultado de una eficaz formación, pero igualmente es espontaneidad y fortalecimiento.
La gratitud se puede expresar más allá del individualismo o personal, se puede tener gratitud por organizaciones, comunidades, grupos, asociaciones con propósitos específicos de bienestar colectivo, los cuales brindan oportunidades de desarrollar talentos y habilidades, en virtud de quienes buscan mejoras en su entorno y convivencia social.
Por ejemplo, la gratitud con la ciudad, con el estado, es potenciar las capacidades que como habitantes de estas tierras podemos tener en favor de un beneficio más general que individual, es ser agradecidos a la tierra que nos vio nacer, que nos cobijó o a la cual hemos decidido pertenecer.
Seamos agradecidos con nuestro entorno, con nuestro sector, con nuestra ciudad, dándole gracias por tanto, aportándole, queriéndola, ella es parte de nuestras vidas, y nosotros somos parte de su historia. El tener gratitud con nuestra entidad, es la mejor prueba de ser mejor ciudadano y de ejercer una mejor ciudadanía.
PARA SER
AGRADECIDOS• Admitamos que necesitamos a los demás.
• Reconozcamos las obras de los otros.
• Incluyamos en nuestro lenguaje expresiones de agradecimiento.
• Aceptemos que muchas de las cosas buenas que tenemos se deben a lo que otras personas nos han dado: amor, protección, cuidados, talento, sabiduría.