Cada vez que en los corrillos de alguna oficina, institución pública, plaza, parque, conversación de parroquianos de esquina o tertulia de amigos, sale a relucir la historia de los gobiernos en Venezuela, de inmediato destaca el período presidencial del catalogado dictador Marcos Pérez Jiménez.
Marcos Pérez Jiménez fue el presidente número 38 de la Historia de Venezuela, gobernando desde el 2 de diciembre de 1952 hasta el 19 de abril de 1953 (donde asume la Presidencia de República de manera constitucional por designación del Congreso Nacional) hasta finalmente llegar el 23 de enero de 195, cuando fuera derrocado por una insurrección popular respaldada por el ejército y las fuerzas vivas de la nación.
Muchos aseguran que la declarada “dictadura” del llamado “gordito de Michelena” ha sido quizas la de mayor auge en cuanto al auge del progreso y desarrollo de toda nuestra historia republicana, incluyendo la época de Guzmán Blanco, quien ejecutó igualmente obras de enorme trascendecia para nuestro desarrollo cultural y social.
Al respecto el hoy periodista y escritor Camilo Portela expresa en un trabajo previo, que : “Cuando decimos dictadura pensamos en injusticias, maldad, miedo, falta de libertad, le damos el mérito a lo malo y nunca pensamos en lo bueno. No analizamos que a veces una dictadura puede hacer cosas buenas, como por ejemplo Hitler, uno de los dictadores más odiados por la humanidad quien hizo sus cosas buenas, como por ejemplo eliminar la desocupación de 6.000.000 de personas en solo 2 año, algo jamás visto en la historia o en 7 años de su gobierno se construyó una red de autopistas nacionales de 12.000 kilómetros que aun hoy en día se utiliza y otras más .
En el documental “tiempos de dictadura” hablan del general Marco Pérez Jiménez uno de los dictadores más importantes de Venezuela históricamente hablando y me llevó a analizar que no toda dictadura es del todo mala .
En este documental expresa todos los aspectos de esta dictadura , en eso resaltan las cosas positivas que hizo Pérez Jiménez como las diferentes obras de infraestructura que realizó en el país, también expresa la crueldad de sus actos, la censura, la tortura, y el encarcelamiento a los dirigentes políticos de la oposición, factores que lamentablemente hicieron de Venezuela un país hundido en el miedo y en la censura de los medios de comunicación.
Claramente esto es un gobierno dictatorial, pero inteligente , no dejó que el país cayera en la quiebra y al contrario lo impulso en todos los factores de la vida nacional, haciendo de la moneda venezolana una de las mejores a nivel mundial; es decir, que a pesar de todo era una dictadura estable una dictadura en donde se podía convivir, no como la actual donde el país está hundido totalmente teniendo la peor crisis de país alguno en Suramérica . Al igual que la dictadura de Pérez Jiménez, vivimos en una extrema censura de los medios de comunicación; sin embargo creo y opino que la de Pérez Jiménez era mucho mejor a pesar de todo. La gente era más feliz que la de ahora, había menos delincuencia, menos pobreza aunque usaban los mismos métodos de gobiernos populistas, no dejaron caer al país ben la bancarrota.
Entre dictaduras te veas
Añade Portela que: “ Ningún gobierno dictatorial es bueno. Estamos en pleno siglo XXI y ese tipo de gobiernos ya no debería de existir, pero tenemos que estar en claro de las obras buenas que han hecho y tenerlo presente para ideas futuras . Incluso Pérez Jimenez venía de participar junto a otros militares en la asonada contra el presidente Isasñias Medina Angatota en el año 49.
A pesar de todo yo siendo ciudadano, prefiero el gobierno de Pérez Jiménez que el de Nicolás Maduro, pero como futuro periodista, no me quedo con ninguno de los dos; la censura de los medios de comunicación es prácticamente el reflejo del miedo de los gobiernos hacia la verdad . Del documental aprendí es, la censura, el miedo y el control de los militares son la base clave de una dictadura , en este mundo una dictadura nunca será buena a pesar de todas las cosas positivas que puedan hacer. En ella se puede reflejar en claro la avaricia y el deseo del poder del hombre”.
Un poco de historia
Pérez Jiménez, era un joven oficial egresado de la Escuela Militar de Venezuela quien cursó luego estudios especializados en la Escuela de Aplicación de Artillería y la Escuela Superior de Guerra en Perú y desempeñó cargos importantes en la administración pública nacional. Su vinculación al movimiento militar lo llevó a participar en la política y es ello lo que le proporciona los contactos necesarios con los diversos grupos militares y los sectores sociales representativos del poder económico de la nación. En este sentido, las condiciones básicas para asumir el Gobierno estuvieron asociadas al conjunto de factores del ascenso personal, tanto como las inequívocas circunstancias políticas presentes en su designación a la presidencia provisional (2.12.1952) y a la presidencia constitucional cuya elección por la Constituyente, el 17 de abril de 1953, correspondía al período comprendido entre el 19 de abril de 1953 y el 19 de abril de 1958.
Las conspiraciones
El 2 de diciembre de 1952 el coronel Pérez Jiménez, declarando actuar en nombre de las Fuerzas Armadas, desconoce el triunfo electoral del partido Unión Republicana Democrática (dirigido por Jóvito Villalba) en los comicios del 30 de noviembre de 1952 y asume, tras la dimisión de la Junta de Gobierno presidida por Germán Suárez Flamerich, la presidencia provisional.
El 5 de diciembre, en el local de la Junta Electoral Principal, fueron proclamados los candidatos del Distrito Federal a la Asamblea Nacional Constituyente, encabezando la lista Jóvito Villalba (URD), Oscar Rodríguez Gragirena del Frente Electoral Independiente (FEI), nuestro trujillano Mario Briceño Iragorry (URD) y Rafael Caldera (COPEI).
El 13, en la Gaceta Oficial se publican los cómputos oficiales de las votaciones realizadas el 30 de noviembre anterior. El 16, Jóvito Villalba y otros dirigentes de su partido son embarcados hacia Panamá por disposición de Pérez Jiménez. El mismo día, Mario Briceño Iragorry hace circular su “Manifiesto al pueblo de Venezuela”, donde denuncia un golpe de Estado contra el legítimo Poder Constituyente, así como la manipulación de las actas electorales y solicita asilo en la embajada de Brasil.
El 17 de diciembre, aparece una publicación de URD al pueblo venezolano, fijando su posición contra el régimen perezjimenista y después lo demás es hotorisa ya contada .
No serría sino hasta el 23 de Enero del 58, cuando a bordo de la “vaca sagrada” Perez Jimenez logra huir del país, desatándose en Venezuela la euforia colectiva por la “restitución de la democracia”.
El “gordito de Michelena” ( Táchira), se asilaría hasta su muerte en España, desde donde varios años después diría ( Libro Habla el General) : “ A mi no me tumbaron los militares y menos cuatro dirigentes de esquina. No quise un baño de sangre y me retiré motivado a los excesos de Pedro Estrada. A los militares del alto mando, los tenía comprados con una botella de whisky, un bistec y una “ p…t”
Gabriel Montenegro.
Fuentes: Camilo Portela y Wilki.