El profesor Gílmer Avendaño en su visita a Boconó compartió su posición con respecto a varios temas políticos, sociales y económicos que se viven por la actual coyuntura del país, “hay mucha incertidumbre, primero porque tenemos un régimen que en vez de explorar salidas que beneficien a la gran colectividad, nos ahoga económicamente, es decir que en 1999 asumió el poder con una economía sustentada en el petróleo, con una producción de 3 millones 500 mil barriles diarios, pero que en el mes de marzo del 2019 producía 746 mil barriles y hoy día está por el orden de 459 mil barriles diarios, esto significa que hay un alto de corrupción en el área petrolera, ineficiencia en el manejo de los recursos y una gran incapacidad que sucumbió esta importante empresa”.
Goticas de oxígeno
Asegura que de acuerdo a la radiografía que emiten informes oficiales, la economía de Venezuela está en bancarrota, puesto que nuestro país tenía 12.500 empresas y hoy día sólo permanecen abiertas 2.300. “Además la reconversión que realizó el Gobierno fue una medida para confiscar nuestras riquezas y es sólo gracias a esos 4 millones de venezolanos a lo largo y ancho del mundo que nuestras familias reciben unas goticas de oxígeno para ir más allá de las quincenas”, dijo y agregó sobre el tema de los derechos humanos “el informe de Bachelet que no tiene vinculación de carácter jurídico, va a ser muy importante y decisivo para que los organismos internacionales y los 50 países que apoyan al pueblo venezolano tengan la base para apretar las medidas contra el gobierno”.
Rechazó el hecho de que “el dirigente político Damián Milano por firmar una protesta en Jalisco, municipio Motatán, fuera detenido, roleteado y aparecido en la comandancia del municipio Boconó, gracias a Dios no es el mismo caso del joven de 16 años en el Táchira o del capitán Arévalo. Ante esto les digo tengamos consciencia ciudadana, no esperemos mecías y a mi casa, el sector opositor, dejen de estar peleando por una tontería”, fustigó.
Saldo negativo
En otro tema y por ser integrante del magisterio educativo, Gílmer Avendaño señaló que el año escolar cierra con un saldo negativo, de los 200 días hábiles de clase que establece la Ley Orgánica de Educación, sólo se cumplieron 145 días, “este déficit demuestra que la calidad educativa es preocupante, pero además de eso, el 75% de los bachilleres en el estado Trujillo van a reparación por el ausentismo escolar (no hay transporte, no hay comida en casa y el PAE fracasó en las instituciones) aunado a la migración de 1.300 educadores de Trujillo y 17.000 a nivel nacional. Con responsabilidad lo digo, este mes la diáspora va a ser mayor. Ya los 80.000 de salario no alcanza”, advirtió.