Giovanny Vielma, Secretario General del Sindicato Único de Trabajadores de la Salud, aseveró que al menos 700 trabajadores del sector salud han dejado sus puestos de trabajo a raíz de las persecuciones, desmejoras salariales o “jubilaciones de gracia”.
“Al Gobierno se le olvidó que fueron los trabajadores de la salud los que dimos la cara en la pandemia (por la COVID-19), aún con sueldos miserables, humillaciones hasta del propio pueblo, gente que temía ser contagiada por nosotros”.
Vielma afirma que una gran cantidad de denuncias se han hecho llegar a la Inspectoría del Trabajo, donde se reseñan las que considera son violaciones a los derechos laborales del personal del sector salud, pero dichas denuncias son “engavetadas”.
El dirigente gremial denuncia que las masivas renuncias responden a un argumento: “nadie puede trabajar con una pistola en la cabeza”. Cree que, al hecho de no percibir salarios justos, se le suma la escasez de insumos, la eliminación de postgrados para la formación médica.
“Aclaro que no quiero desprestigiar a los Médicos Integrales Comunitarios, solo estoy diciendo que no hay especialistas (…) tenemos ‘jefes’ sin preparación, fue eliminada la contraloría hospitalaria. No tienen moral los gobernantes para exigirles nada a los empleados de la salud, porque solo estamos percibiendo $ 13 mensualmente (…) la política partidista acabó con los hospitales del estado”.
Por último, Vielma insiste en que el área de neonatología y maternal deben ser reubicadas para minimizar las contaminaciones a las que – a su juicio están constantemente expuestas.
Por: Alexander González CNP 25.770
@AlexGonzalezDigital