Caracas, 1 ago (EFE).- El exdiputado antichavista Freddy Superlano, detenido el pasado martes, está dando información a las autoridades sobre las protestas desatadas en rechazo al resultado electoral del domingo, según dijo este jueves el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, quien cree que las manifestaciones forman parte de un «golpe de Estado cibernético».
«Está cooperando. Aparte de admitir algunas de las cosas que aquí hemos ido narrando (…) él está aportando datos más interesantes, porque ya tenemos identificado un grupo más grande de quienes han participado en este ataque al sistema de actualización de datos del Consejo Nacional Electoral (CNE)», dijo el fiscal.
De este modo, la Fiscalía vincula al antichavista con el jaqueo que, según las autoridades, sufrió el CNE el pasado domingo, cuando se desarrollaba la elección presidencial, lo que retrasó el conteo de votos pero no impidió que el jefe de Estado, Nicolás Maduro, fuera proclamado ganador, con el 51,2 % de los apoyos.
«Está en buen estado de salud, (ha sido) visitado por fiscales adscritos a la división general de derechos humanos, (está) protegido en su lugar de reclusión pero cooperando, dando elementos importantes que poco a poco vamos a ir revelando», añadió Saab sobre Superlano.
Sin embargo, la esposa del opositor, Aurora Silva, denunció que al exdiputado «lo han estado torturando» para que «salga, posiblemente, a declarar» en contra de la líder antichavista María Corina Machado y de Edmundo González Urrutia, que fue candidato en las presidenciales de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
Silva acudió a un tribunal de Caracas junto al representante legal de Superlano, Joel García, para introducir un ‘habeas corpus’ y exigir que el opositor sea presentado en los juzgados, ya que se desconoce «dónde se encuentra» desde este martes, cuando fue detenido por «funcionarios encapuchados», según denunció el partido Vente Venezuela.
El exdiputado fue detenido en medio de denuncias del Gobierno de un golpe de Estado en marcha por parte de la PUD, que asegura haber ganado las elecciones, cuestionadas dentro y fuera del país, lo que ha incentivado numerosas protestas que se saldan con, al menos, 11 fallecidos.
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