Manila, 18 jul (EFE).- La Comisión de Derechos Humanos (CHR, en inglés) denunció este viernes la venta de bebés «especialmente a través de plataformas en línea», tras documentar recientemente varios casos, entre llamamientos a investigar la posible existencia de mafias dedicadas a esta actividad.
El organismo expresó en un comunicado «su grave preocupación y condena» por la «prevalencia» de la venta de niños en el archipiélago, haciendo referencia a casos «alarmantes» entre los que se encontraba un bebé de un mes «que fue sometido a esta abominable práctica».
La comisión llamó al Gobierno filipino a tomar medidas urgentes, incluyendo aumentar la supervisión de las redes sociales y garantizar el rápido enjuiciamiento de los autores.
A la alarma desatada por la CHR se unió el pasado jueves la petición de la senadora Pia Cayetano para investigar, en la cámara alta del Congreso, la posible implicación de mafias dedicadas a la venta de menores en línea.
«Este asunto es un doloroso recordatorio de la profunda pobreza y desesperación a la que se enfrentan algunas familias, pero eso no puede justificar la explotación de nuestros niños. Debemos dar a las madres y a las familias alternativas reales», dijo Cayetano, según un comunicado del Senado.
Las autoridades filipinas han reportado en el pasado varios casos de venta en línea de bebés.
El Departamento de Justicia anunció, hace exactamente un año, haber detenido a una mujer por intentar vender a un bebé de tan solo seis días por 25.000 pesos (unos 437 dólares). En marzo de 2024, la Autoridad Nacional para la Protección de la Infancia denunció haber detectado 23 páginas en la red social Facebook dedicadas a vender niños haciéndolos pasar por adopciones.
Pero la crisis en Filipinas no se limita a la venta de menores en línea, sino que el archipiélago es desde hace años uno de los centros mundiales de la pornografía infantil en la red.
A falta de estadísticas oficiales, informes de organizaciones internacionales como la Misión Internacional de Justicia apuntan a que solo en 2022 medio millón de menores en el país asiático fueron explotados por adultos para crear pornografía destinada a delincuentes de todo el mundo.