Fila: del campo a las redes sociales. «¡Todo lujo!»

¡Todo lujo! Así saludó Filadelfo Araujo al entrar a las oficinas de Diario de Los Andes. Sonriente y con su sombrero de campesino, el personaje mejor conocido en sus redes sociales (RRSS) como Fila, se mostró seguro de sí mismo, como si las entrevistas fueran parte de su rutina diaria.

Del campo a las redes sociales, este joven oriundo de Tuñame hace reír a sus casi 40 mil seguidores en Tik Tok, gracias a los contenidos que el mismo crea para “mostrar la realidad del campesino”.

Con un talento particular para la música y la comedia, sus dos grandes pasiones, Fila se ha convertido en el ejemplo a seguir de muchos campesinos andinos que ven sus videos y reconocen en él la capacidad de trabajar por lo que se ama.

Filadelfo no planificó tener el alcance que hoy en día ha logrado a través de sus redes sociales. Al ver la receptividad de su primer video viralizado en Tik Tok, el personaje vio la oportunidad de “mostrar la realidad del campesino, resaltando la comedia”.

 

¿Cómo empezaste en las redes sociales?

“Yo mismo me grababa, no tenía ni aro ni nada, entonces inventaba con los parales del micrófono, o el compadre me grababa a mí y yo lo grababa a él. Como me ha gustado siempre lo de edición y montaje, yo mismo lo editaba y lo montaba. Las ideas las creaba, y las sigo creando solo, a veces las discuto con mi familia, porque usted sabe que dos cabezas piensan más que una”.

Filadelfo estudió diseño gráfico en el Iutirla, fue parte de la coral universitaria y se graduó en el año 2017. Desde entonces, no pudo ejercer durante mucho tiempo su carrera, pues se dedicó al comercio y a la agricultura; hasta que uno de sus videos alcanzó más de 80 mil reproducciones en Tik Tok.

Antes de comenzar a ser viral en redes, Filadelfo dedicaba parte de su vida a la música. Secuencia Show es el conjunto musical del cual Fila es parte, junto a otros 7 compañeros.

“Soy tecladista, toco el teclado, el cuatro, la percusión y canto”, relató.

 

¿Algún problema que hayas tenido al empezar a trabajar con las redes sociales?

“Los problemas vienen con el cambio que ha dado mi vida, porque la costumbre en Tuñame es que las personas siembran, compran, o tiene sus bodegas. Pero es raro que alguien haga cosas diferentes, y más ver un influencer, en los campos no hay quien grabe, y si lo hacen es arando o sacando las papas, pero no en este sentido.

Dicen que nadie es profeta en su tierra, pero yo creo que sí he sido, porque allá en Tuñame me tienen mucha admiración y respeto”.

A pesar de ser un amante de las redes sociales y considerarse un personaje público, Filadelfo afirma que “nunca ha dejado el campo pa’ nada”, con su nuevo trabajo en las RRSS tampoco piensa hacerlo.

Sobre su sentido de pertenencia

“Yo he tomado frases propias del trujillano y la doy a conocer en muchas partes, anteriormente hacían burla por el dialecto del campesino, ahora la gente habla como uno por ahí. ¡Que jué, todo lujo, me chifla! Hasta se mandan audios así.

Yo lo que tenía eran 5 seguidores de la casa, ahora el contenido que hago se conoce en los campos de Mérida, Táchira, Trujillo. En todos los campos que uno llega lo conocen”

¿Qué es lo que más te ha gustado de crear contenido?

“La receptividad de los niños es la que más me ha gustado. Los niños han sido punto de inspiración para mis videos y mis proyectos”.

Entre una de las anécdotas que recuerda con especial sentimiento, Fila menciona el encuentro con una niña invidente en Timotes.

“La mamá se acercó y me dijo: mira yo quiero que te saques una foto con mi niña, pero es ciega, ella solo escucha tus videos.

Entonces la niña me dijo: ¿Usted es fila? Le respondí: sí, yo soy fila. Ella me abrazo y dijo: yo lo quiero mucho, yo escucho sus videos.

Después de eso no pude reírme más”.

¿Cómo te proyectas en un futuro?

Si algún día yo tengo la posibilidad de ayudar a tantos niños, esa sería la satisfacción más grande para mí. Sin que me quede nada a mí, eso se lo paga Diosito a uno.

Se me acercan niños especiales, o en sillas de ruedas. Al ver esa alegría de ellos yo digo: ahí está Dios, está en ese proyecto que le llega a uno. Y no sé qué me tiene preparado a mi Dios con esto, pero he ayudado a algunos con videos de colaboración para operaciones y hemos tenido buena receptividad, hemos logrado que la gente aporte”.

El talentoso trujillano Filadelfo Araujo sueña con mostrar la capacidad que tiene a nivel nacional e internacional, y de esta manera dejar en alto el nombre de los campos trujillanos. ¡Lujo!

 


Por: Génesis Chinchilla ECS

Fotos: Alexander González

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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