¿A quien obedecen, al régimen o a la Constitución?
Douglas Abreu
@douglasabreub
Si alguna institución fue objeto de crítica – más destructiva que constructiva – dentro de ese natural antagonismo político-militar durante los últimos 40 años de verdadera democracia del siglo XX por parte de la dirigencia de izquierda, y algunos golpistas aspirantes a dictadorzuelos, que con todo y sus errores siempre se mantuvo institucional, fueron la Fuerzas Armadas Nacionales (FAN), sobre todo quienes han comulgado con este proyecto ideológico-militar denominado Socialismo del Siglo XXI dedicados en esa época a desprestigiarlas interna y externamente, entre quienes se encontraban muchos de los que han ostentado el poder desde hace 20 años. A lo interno, fue el resentimiento y fuera de los cuarteles, lluvias de denuncias – entre verdaderas y falsas – tráfico de influencias, corrupción, entre otras, uno de ellos, el más obstinado y obsesionado José Vicente Rangel, en su programa “José Vicente hoy” que se transmite los domingos por Televen. Que bien vale la pena no olvidar, este personaje ha ejercido durante este régimen, los altos cargos de vicepresidente de la República; canciller y ministro de la Defensa.
Año 1999 comenzó el quiebre y destrucción de la FAN
Para las FAN todo cambió desde 1998 con la llegada al poder del militar Hugo Chávez, quien junto a otros compañeros de armas protagonizaron un frustrado golpe de estado el 4 de febrero de 1992. En 1999 comenzó el quiebre y la destrucción moral, ética e institucional. Con la nueva Constitución pasaron a ser Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), desapareció su carácter de “No beligerancia” y con ello su politización y partidización. Todos los estudios, análisis e investigaciones indican que se trató de un plan diseñado entre un gobierno de naturaleza militar y el régimen cubano para hacer de las FANB el brazo armado de la revolución.
Ese maligno plan hizo y sigue haciendo de los principios y valores que regían a sus integrantes desde el generalato hasta el más humilde soldado presa fácil del inoculado germen de la corrupción que se incrustó en su cuerpo, alma y corazón, lo cual se inició por síolo nombrar uno, con el monumento a la corrupción Plan Bolívar 2000, con el cual las FANB, a través de los comandantes del ejército en cada región ejecutaban obras por administración directa, “cobraban y se daban el vuelto”; inversión y gastos que se hicieron sin control previo alguno. Son numerosos los casos de corrupción denunciados con la ejecución de dicho plan.
FANB también ostenta poder político-gubernamental
De manera sistemática y progresiva las FANB han ido ampliando y extendido estratégicamente durante la gestión de Nicolás Maduro ese poder militar-político al ámbito gubernamental, como lo demuestra el manejo de diferentes e importantes ministerios, como Interior, Justicia y Paz, a cargo de G/J Néstor Reverol y por ende los Cuerpos de Seguridad de Estado, Energía y Minas y la estatal petrolera PDVSA, en manos del activo G/M Manuel Quevedo, la Gran Misión de Abastecimiento Soberano, a través de la cual maneja la adquisición, comercialización y distribución de alimentos. También medicinas, insumos y equipos medicoquirurgicos. Han ocupado la Tesorería Nacional. A las carteras ministeriales se suman institutos, empresas estatales y de producción social. Paralelamente, utilizan ese poder militar en actividades de acuerdos a denuncias hechas públicas dentro y fuera de nuestras fronteras de narcotráfico, complacencia con grupos irregulares, extorsiona, matraqueo y bachaquerismo. Por lo que si cambia el gobierno es mucho lo que tienen que perder, de allí, el temor.
Este protagonismo gubernamental evidencia que las FANB, o mejor dicho quienes las manejan y controlan son gobierno, y como tal, tienen los mismos intereses personales y económicos, es otro grupo más dentro del chavismo, que lideran Padrino López y Remigio Ceballos que se pelean el poder al igual que Maduro-Cilia; Diosdado Cabello, Tareck El Aissami, los Chávez, Delcy y Jorge Rodríguez.
FANB convertidas de facto en partido político
A ese poder militar y gubernamental se suma el político-electoral, como toda organización partidista, cuenta con una poderosa militancia que igualmente son votos, que en este caso, son los militares y civiles que prestan servicios y laboran, respectivamente en dicha institución castrense. Pero es que también, son una maquinaria electoral, ya que manejan discrecionalmente el Plan República, con el cual han trabajado y seguirán trabajando a favor de los candidatos del PSUV y el Gran Polo Patriótico (GPP) – que también son los de las FANB – ganen todo proceso electoral. La participación de miembros de la FANB en actos proselitistas no dejan dudas, basta verlos en marchas, concentraciones y mítines, o pararse firmes, gritar consignas y aplaudir a Diosdado Cabello, conductor del programa “Con el mazo dando”.
Estamos en presencia de una Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), convertida de facto en un partido político, sólo falta ver a Vladimir Padrino López, participar en las reuniones del Gran Polo Patriótico (GPP), como secretario general del partido FANB al lado de Diosdado Cabello, en representación del PSUV, Oscar Figuera del PCV; Casto Gil Rivera del MEP; Juan Barreto de Redes; Rafael Uzcategui, del PPT; y demás representantes del resto de las organizaciones de esta alianza electoral. Consignar las nóminas del personal civil y militar ante el CNE convertidas en militantes. Bueno el colmo, si esto llega hasta ese extremo, ¿tendrá el partido FANB un lugar reservado en el tarjetón electoral?
Vladimir Padrino López: Esta FANB es revolucionaria y chavista
Si existe alguna duda, basta recordar algunos fragmentos del discurso pronunciado el 5 de julio de 2014 por el General en Jefe Vladimir Padrino López, cuando se desempeñaba como Comandante Estratégico Operacional de la FANB (…) Si en alguna institución del Estado, sin demeritar ninguna otra, por supuesto, con todo respeto, germinó la semilla de la Revolución Bolivariana, es en esa institución que se llama Fuerza Armada Nacional Bolivariana (…) Esta sí es la verdadera Fuerza Armada Nacional Bolivariana que se corresponde con las ideas originarias antes mencionadas y que recoge su carácter antiimperialista, humanista, popular, profundamente democrática y amante de la paz. Esa es nuestra FANB. ¿Y saben qué, queridos compañeros? Lo voy a decir con mucha responsabilidad, atendiendo a la ética y atendiendo a la gran política: ¡Esta Fuerza Armada Nacional Bolivariana es chavista!
Remigio Ceballos: FANB en defensa del legado de Hugo Chávez
El segundo hombre fuerte del estamento militar, G/J Remigio Ceballos, no sabemos si igual o peor que Padrino López, quien al asumir como comandante en jefe del Comando Estratégico Operacional (CEO), recordó que la paz de la Patria ha sido atacada e intentado ser alterada de manera drástica desde hace 20 años por sectores apátridas que no reconocieron nunca el triunfo del Comandante Hugo Chávez y el surgimiento de un gobierno humanista como el logrado por la Revolución Bolivariana.” (…) “La FANB está blindada con moral inquebrantable y con unidad monolítica que no podrán socavar”. Agregó que sus miembros están incorporados al Movimiento Somos Venezuela. (…) Aseguró que la respuesta de la FANB y del pueblo venezolano es la defensa del legado de Hugo Chávez”.
¿Puede contar el pueblo venezolano con estas FANB?
En consecuencia, ¿puede contar la sociedad venezolana con una FANB que ha sobrevenido en lo anteriormente descrito, puede esperar el pueblo venezolano que esta institución castrense con ese comportamiento defienda sus derechos, abusos del Ejecutivo Nacional, la impunidad por los organismos encargados de impartir justicia y/o actuar imparcialmente en los procesos electorales? Por supuesto, que no creen mucho menos que eso suceda. Razón por la cual, ante la ausencia de una FAN institucional que defienda y proteja a su pueblo, necesario y obligatorio es que actúe e intervenga la comunidad internacional y que sean Fuerzas Armadas de países amigos que asuman esa defensa y protección que según de opinión más del 90% de los venezolanos estarían de acuerdo. Ojo, que para nada se trataría de una invasión militar como estratégicamente lo quiere hacer ver el régimen a propósito de una intervención militar que por cierto ha sido negada por ahora pero no descartada si es necesaria. De ser así no será precisamente, el “Chapulín Colorado” quien vendrá a defendernos.
