Lelis Bautista, directora de Política de la Gobernación del estado Táchira, repudió los hechos acaecidos durante los últimos días en El Helicoide de Caracas, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), con los presos políticos, especialmente los tachirenses.
Exigió al Gobierno de Nicolás Maduro que revise sus actuaciones para que pueda presentarse de manera coherente ante los venezolanos, pues de lo contrario, “¿con qué cara se dirigirá el presidente frente el pueblo después de las calamidades y la tragedia que ha causado?”.
La funcionaria fue enfática en decir que el Ejecutivo debe dejar de hacerse el sordo y el ciego ante la realidad que atraviesa el país, debido a las innumerables acciones que se realizan a diario se enmarcan en el irrespeto de los Derechos Humanos.
Ante esta realidad, y con respecto al caso puntual de lo ocurrido en el Helicoide y en el Centro Nacional de Procesados Militares de Ramo Verde, señala que se respira un ambiente zozobra, pese a que los individuos de este país “ya perdieron la capacidad de asombro ante tantos atropellos que se suscitan a diario”.
A Tarek William Saab, fiscal general de la República, solicitó que revise los casos de los presos políticos para que pueda verificar las denuncias que ellos hacen desde el miércoles, cuando se alzaron en protesta por las condiciones inhumanas en las que dicen vivir ahí adentro.
Asimismo pidió que analice los expedientes de los que afirman retardo procesal en sus causas judiciales y que aún permanecen privados de libertad. “Él está al tanto de los acontecimientos y tiene la obligación de proceder”.
También se dirigió al defensor del pueblo, Alfredo Ruiz, para que con firmeza “haga respetar los derechos ciudadanos de cada uno de los imputados”. Sugirió que vele porque los procedimientos estén apegados a la ley, para que quienes tengan boletas de excarcelación, puedan -de una vez por todas- ser puestos en libertad.
Desde el Táchira
Bautista puntualizó que el pueblo del Táchira está firme en la exigencia de la libertad de sus coterráneos.
Agregó que mientras estén en el Helicoide, los tachirenses no esperan otra cosa más que se le respete la vida y la integridad física, a cada uno de los presos políticos, “porque ellos no han cometido ningún delito más que pensar diferente”.
Habló por las numerosas familias que han sido separadas y en las que prevalece el dolor, el miedo, la incertidumbre, la angustia, la desesperanza, y el ya no saber qué hacer para que sus parientes puedan -por fin- regresar a sus hogares.
“La injusticia y la retaliación por sus ideales mantiene tras las rejas, en condiciones denigrantes, a estos venezolanos”, concluyó.
NP