Tras 67 años de fundación, el Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal está atravesando por la más profunda de sus crisis, lo que ha provocado que sus funcionarios se mantengan en sus cuarteles, sin atender los llamados de auxilio en caso de incendio, accidente o cualquier otra emergencia, ya que no cuenta con vehículos ni equipos que les permita cumplir con las acciones de auxilio y socorro de manera adecuada y segura
La profunda crisis que atraviesa el cuerpo de bomberos de San Cristóbal, parece no ser suficiente para encender las alarmas y provocar una reacción de las autoridades municipales, regionales y nacionales, que, con pasmosa indiferencia, se desentienden de una situación que mantiene a la ciudad sin bomberos y a la ciudadanía indefensa y sin protección, en caso de una situación de emergencia, desastre o catástrofe.
Los bomberos son considerados como servicio de utilidad pública, por la naturaleza de las funciones que cumplen. No solo tiene entre sus tareas la prevención, extinción de incendios, sino que su actividad los lleva a ocupar los puestos de vanguardia en casos de emergencias, puesto que su intervención es puntual a la hora de llevar ayuda, salvar vida y bienes.
Indiferencia oficial.- De todos es sabido que la mística y vocación de servicio son cualidades que caracterizan a los hombres y mujeres que uniformados de azul arriesgan su propia seguridad en aras de auxilio al prójimo. Forman parte de un organismo de auxilio y socorro reconocido y respetado por la humanidad, pero al cual, lamentablemente, en San Cristóbal, no se la ha dado el sitial que merecen, y su situación se ido deteriorando, hasta el punto de caer en una profunda crisis
Si bien es cierto, este problema se viene presentando desde hace algún tiempo y su deterioro se agudizó en los últimos meses, hasta el punto de convertirse en un pesado fardo que fue heredado por las autoridades actuales, no es menos real, que la situación ha sido asumida con indiferencia, sin la reacción adecuada, ni tomar en cuenta que olvidarse de los bomberos es olvidarse del pueblo que recibe sus beneficios y los tiene muy en cuenta, mas, cuando existe compromiso de vida ven como la falta de equipos e implementos, hacen que en algunos casos, las operaciones bomberiles rocen los linderos del heroísmo.
En esta recuperación tienen responsabilidad varios organismos y funcionarios. En primera instancia la alcaldía y el concejo de San Cristóbal, la gobernación del estadal Táchira y el Consejo Legislativo estadal, instancia que no han dicho una palabra al estar inmersos en la solución de otros problemas, que si bien, son importantes, no pueden ser óbice para desatender la crisis de los bomberos.
Sin carros ni equipos.- Resulta curioso que las emergencias que por ley corresponde atender al Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal, hayan sido asumidas por otro organismo de auxilio y socorro, como lo es Protección Civil – Táchira, que con un pequeño camión cisterna, sin los equipos necesarios para tal función, se hayan visto obligados a enfrentar incendios de estructura, como el ocurrido la pasada semana en el Barrio El Rio, con el lamentable saldo de tres personas fallecidas.
Esta situación también coloca en peligro la seguridad de los funcionarios de PC – Táchira pues tampoco tienen los equipos adecuados para este tipo de operaciones, aun cuando si la voluntad y un gran espíritu de servicio.
Se hace necesario que las autoridades reaccionen y la prometida declaratoria de emergencia de los bomberos de San Cristóbal sea una realidad de una vez por todas y venga acompañada de soluciones, entre ellas la recuperación del parque automotor, que comprende unidades ambulancias, combate de incendios, cisternas, rescate y operaciones, entre otras, que se encuentran paradas desde hace tiempo por problemas de tipo mecánico.
Los bomberos no cuentan ni siquiera con un vehículo adecuado para sus operaciones y se han presentado casos como el ocurrido hace algunos meses atrás, con el incendio en una estación de servicio de Barrio Obrero, ubicada a escasos doscientos metros del cuartel central, a donde los bomberos llegaron a pie, sin equipos, para convertirse en simples espectadores, o apoyar en algo a los funcionarios de Protección Civil, que llegaron para enfrentar la emergencia.
A la crisis que mantiene fuera de servicio al parque automotor, se suma la carencia de equipos e implementos, tales como mangueras, pitones, equipos de penetración y protección, chaquetones, cascos y herramientas. Desde hace varios años, no se dota al Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal de uniformes.
A esto se suma las deplorables condiciones en que se encuentran las instalaciones bomberiles, un cuartel central y tres sub estaciones, pésima alimentación y los bajos sueldos y salarios, así como otros beneficios económicos, que no compensan los riesgos que enfrenta el personal.
Respuesta inmediata.- La magnitud de la crisis bomberil amerita una respuesta inmediata de quienes tienen responsabilidad en aportar soluciones, específicamente alcalde, concejales, gobernadora, diputados y hasta el mismo sector privado que puede hacer un aporte que en mucho ayudaría.
No debemos ignorar la vulnerabilidad en que nos encontramos los habitantes de la capital tachirense y de municipios cercanos, que, por no contar con el servicio de bomberos, siempre han recibido apoyo por parte de los apagafuegos de San Cristóbal.
No debemos esperar más y, actuar sobre la marcha en soluciones, hasta obtener las condiciones adecuadas para manejar con propiedad un evento, que en un momento dado se pueda presentar. No permitir que nos sorprenda a su merced, indefensos, convirtiéndose en un posterior motivo de lamentaciones. La crisis de los bomberos de San Cristóbal está ahí, real y desafiante, y amerita una inmediata solucionen al menor tiempo posible.