Nueva York, 27 sep (EFE).- España seguirá sin reconocer a Edmundo González como presidente de Venezuela a la espera de que triunfe la voluntad expresada por los venezolanos en las urnas, una posición que el Gobierno español recalca es unitaria de la Unión Europea.
La posición española fue ratificada este viernes en Nueva York por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, en una rueda de prensa para hacer balance de la serie de reuniones y actos a los que ha asistido con motivo de la Semana de Alto Nivel de la ONU.
Entre esas reuniones hubo una con el vicecanciller venezolano, Ránder Peña, en la que exigió que España pueda brindar acceso consular a los dos españoles detenidos en Venezuela, José María Basoa y Andrés Martínez Adarme, así como que se comuniquen los cargos concretos contra ellos.
«Que a nadie le quepa duda que desde el Ministerio de Asuntos Exteriores y yo personalmente no se va a escatimar ningún esfuerzo hasta que estos dos compatriotas injustamente retenidos en Venezuela estén donde siempre tenían que estar, en libertad y con sus familias», añadió antes de insistir en que es «inaceptable» su situación.
Albares participó también en una reunión auspiciada por Estados Unidos y Argentina y a la que asistieron 32 países para analizar la situación en Venezuela y tras la que los reunidos firmaron un comunicado en el que se refieren a Edmundo González como la persona que ganó «la mayoría de votos», de acuerdo a «las actas electorales disponibles públicamente».
Al plantearle si no sería lógico que eso implicara que los países firmantes reconcieran a González como presidente, Albares dijo que ninguno de los presentes en el encuentro defendió ese reconocimiento.
Sí resaltó que lo que queda plasmado en el comunicado suscrito es que todos quieren «que triunfe la voluntad democráticamente expresada por los venezolanos» y mostró su pesimismo ante la posibilidad de que el Gobierno de Nicolás Maduro, tal y como está exigiendo la comunidad internacional, haga públicas las actas electorales.
El ministro aseguró que España tuvo una participación muy importante en esa reunión, en la que estuvieron presentes los principales países europeos y el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Josep Borrell.
Recordó Albares que la UE tiene una posición común «clara y conocida» sobre Venezuela y que ha estado liderada por España.
«Podemos tener distintas visiones sobre Venezuela, pero todos estamos de acuerdo en que es la voluntad democráticamente expresada por los venezolanos la que tiene que avanzar», añadió.
Y eso recalcó que tiene que lograrse mediante el diálogo y la negociación, de manera pacífica y buscando una solución «que tiene que ser entre venezolanos y en Venezuela, porque no puede venir impuesta desde el exterior».