Escuela de Reciclaje llega al Táchira para buscarle solución al caos de la basura  

Separar desechos y reciclar contribuirá, según Ronny Chacón, director de la Escuela de Reciclaje, a bajar los costos en pago de camiones recolectores de aseo urbano, así como también disminuir la contaminación en los espacios de disposición final 

La Escuela de Reciclaje inició con módulos de formación a través de las redes sociales, que se extendieron a grupos de Whatssap, hasta que puedan ser presenciales. Carlos Eduardo Ramírez 

 

 

Por: Mariana Duque/DLA

@mariananduque

La Escuela de Reciclaje fue instalada en febrero del año 2020. Busca ser un punto de integración entre todos los actores de la sociedad para crear conciencia y enseñar la importancia del aprovechamiento de lo reutilizable.

San Cristóbal.  Hablar de reciclaje en la ciudad de San Cristóbal ha sido más un sueño que una realidad. No ha pasado de ser una promesa política, un anuncio ministerial del deber ser en el tratamiento de los desechos sólidos, un llamado de atención de parte de los investigadores y conocedores de las universidades.

Soñar con una ciudad y un estado limpio, se ha quedado allí, en un anhelo. Desde los ciudadanos, hasta los gobernantes han convertido el tema de la basura en un problema, que pasa por la falta de conciencia ciudadana a la hora de sacar las bolsas, la acumulación en el vertedero a cielo abierto de San Josecito, el daño de maquinarias y los incendios allí generados, el escaso pago de impuestos para posteriormente cancelar a las empresas de recolección, las fallas en  el suministro de combustible, y las trancas en los alrededores del vertedero por las fallas en los servicios públicos que enfrentan las comunidades aledañas.

Desde hace años, a través de la carrera de ingeniería ambiental, la Universidad Nacional Experimental del Táchira (Unet) ha estado trabajando en cuanto a reciclaje y la necesidad de enseñar a la ciudadanía a concretarlo. Desde el año 2018 junto a la alcaldía de San Cristóbal y el Consejo Noruego han realizado algunos talleres y prácticas, que no han pasado de ser pequeños focos de aprendizaje.

Sin embargo, desde los conocimientos allí emanados un grupo de ingenieros en alianza con la empresa AndesPlast Recicla, crean la primera Escuela de Reciclaje de Venezuela, ubicada en la avenida Libertador de la ciudad de San Cristóbal, con el fin de cambiar esta realidad.

 

Con la separación de desechos y el reciclaje el director de la Escuela de Reciclaje indica que al camión recolector irá solo el 20% de 100 toneladas de desechos. Carlos Eduardo Ramírez

Pasar frente a las instalaciones, roba la atención del transeúnte. Se trata de un espacio colorido, organizado y distribuido de manera tal que hablar de basura, desechos, separación y reciclaje, se convierte en un elemento de interés, y no de aburrimiento.

Su instalación se llevó a cabo en febrero del año 2020, con la intención de comenzar con la formación presencial en unidades educativas cercanas a la escuela, pero con la llegada del decreto de emergencia nacional por la pandemia del COVID-19 en marzo de 2020, tuvieron que cambiar la programación, e iniciar con un plan a través de las redes sociales Instagram y twitter @escueladereciclaje donde establecen los términos y aspectos básicos.

A mediados de 2020 desarrollaron un plan piloto por grupos de WhatsApp. Contando con 423 participantes provenientes de San Cristóbal, Mérida, Panamá, España, Costa Rica y Colombia, el cual les permitió medir el interés de la sociedad a nivel regional, nacional e internacional en la material.

El director de la escuela, Ronny Chacón, ingeniero ambiental y docente de la Unet, precisa que la escuela fue creada con la intención de enseñar sobre cómo separar desechos y su impacto positivo en el ambiente. La idea de sus creadores AndesPlast Recicla, es llegar a las comunidades, organizaciones de la sociedad civil, sector privado, ONG, comercios e industrias, organismos públicos: locales, regional, nacional, y la institución académica en todos sus niveles, con el objetivo de acabar con los problemas de recolección y acumulación de desechos en la capital tachirense y el país.

La Escuela de Reciclaje está integrada por un equipo de 12 ingenieros ambientales y 12 ingenieros industriales. Cuentan con asesoría y contactos a nivel mundial, y un espacio adecuado para la enseñanza.

 

De la conciencia hasta el producto final

Tocar la conciencia y la emotividad del ciudadano, al enseñarles que está en sus manos tener espacios limpios, es la prioridad de la Escuela de Reciclaje, según explica Ronny Chacón, quien destaca que salir del atraso de 30 años que tiene San Cristóbal en el tratamiento de los desechos sólidos, implica un cambio en cada uno de sus habitantes.

“La escuela entra en ir del desconocimiento al conocimiento en un proceso formativo, permanente, continuo y a la vanguardia. Hay que tocar parte de las fibras, parte de la conciencia, y la parte emotiva. Decir que está en tus manos, en las mías, tener un mejor espacio, una mejor calle, una mejor ciudad, y depende es de cada uno de nosotros. La Unet ha sido uno de los grandes aliados, con los pasantes y hasta en tesis se ha levantado información en los últimos cinco años, y podemos decir que Táchira tiene la mayor información a nivel nacional en la materia, desde estudios de caracterización, que es estudios de línea base, y podemos decir que del 100% que genera la ciudad de San Cristóbal, aproximadamente entre un 60 y un 65% es orgánico, entre un 20 y 25% es aprovechable”, explica.

Entre lo aprovechable se encuentra el papel, el vidrio y el plástico. De aprender la ciudadanía a separar, lo que iría al camión del aseo es solo un 20% de la basura.  “De cada 100 toneladas solamente 20 irían para el camión del aseo, una quinta parte. Podemos a través de la parte técnica, a través de alianzas poder reducir. Si podemos reducir un 80% ya la ciudad está más limpia. Se utiliza menos el servicio de aseo urbano, van a ir menos desechos al vertedero que sigue contaminando. Son impactos positivos que arrancan con una simple acción, separar desde casa. Es el poder que tenemos cada uno como ciudadanos”, manifiesta.

Precisa Chacón que al separar el plástico desde el origen y procesarlo se reducen al año 3.360 viajes al vertedero de un camión compactador de 15 yardas, los cuales tienen un recorrido promedio de 40 km de ida y vuelta a San Josecito. Se evitan ocupar 752.400 m3, equivalentes a llenar dos veces el Estadio Polideportivo de Pueblo Nuevo.

 

En la Escuela de Reciclaje procesan la materia prima que convierten posteriormente en bolsas para el aseo, con material resistente. Carlos Eduardo Ramírez

Por ello, su objetivo está enfocado en cambiar el sistema con un enfoque hacia la gestión integral de los residuos y desechos sólidos, con un reciclaje efectivo, desarrollando e implementando un sistema integrado que vaya con una separación desde el origen: viviendas, escuelas, empresas, instituciones, y no en los vertederos.

Tiene una capacidad para la formación de 4.800 estudiantes al mes, a través del desarrollo del área virtual, biblioteca digital, eventos sostenibles, cursos, talleres, diplomados, seminarios y jornadas de investigación; y cuentan también con un módulo intermedio, sobre la gestión integral en cada una de las fases y sus elementos técnicos, y un módulo avanzado para establecer producción y consumo responsable, alineado al objetivo de desarrollo sostenible número 12, y aspectos de economía circular.

 

El sistema

A partir de allí la primera Escuela de Reciclaje del país plantea varios elementos a seguir, iniciando con un proceso educativo continuo, que pasa por la formación y capacitación permanente para generar una cultura sobre el reciclaje y la temática ambiental; continuando con rutas de recolección selectivas, para tener un servicio diferenciado de recolección de sólo lo reciclable; la instalación de centros de acopio y tratamiento, que estén distribuidos de manera estratégica con maquinaria para reducción del volumen del material; la ubicación de una red de puntos verdes y recolectores de base en las comunidades, comercios e instituciones; y finalmente la recepción en la planta de procesamiento.

 

La economía circular

 

La recolección del aseo urbano, su disposición final y el control en las calles ha sido un reto para los gobernantes en San Cristóbal. Carlos Eduardo Ramírez

La optimización y ahorro de recursos es otro de los propósitos del reciclaje, y una prioridad de la Escuela, la cual cuenta con el primer contenedor de punto verde para la recolección de plástico. Allí procesan la materia prima que ofrecen a otras empresas, y convierten posteriormente en bolsas para el aseo, con material resistente.

Ronny Chacón, director, destaca al respecto que la economía circular nace del ejemplo de la naturaleza, porque en el medio natural no hay basura, todos los materiales se reutilizan. Por ello, tienen disposición de recepción de plástico en su sede las 24 horas del día, para posteriormente convertirlo.

En la economía circular establecen cuatro puntos: la producción, donde el plástico se convertirá en materia prima; el consumo- generación, al ciudadano evitar el desperdicio, conscientes de los beneficios y habilitados para contribuir en la transición; el manejo integral, que pasa por el sistema efectivo de recolección de residuos, al existir una disminución en la generación de desechos, evitando la basura y manejando los residuos de manera adecuada; y finalmente ver el residuo como un recurso, cuando el recurso que antes era desechado en vertederos, ahora es procesado como materia prima y reinsertado en el proceso productivo.

 

La Escuela cuenta con el primer contenedor de punto verde en San Cristóbal para la recolección de plástico. Carlos Eduardo Ramírez

Proyecto legal

Desarrollar una ordenanza ambiental para la ciudad de San Cristóbal que cuente con aspectos de producción, consumo responsable y economía circular, a pesar de considerarla una de las más completas a nivel nacional, es otro de los objetos de estudio de la Escuela de Reciclaje.

Un equipo de expertos ha estado trabajando en la revisión de la ordenanza actual, para presentar posteriormente el proyecto de mejor al Concejo Municipal y a la alcaldía de San Cristóbal. Hasta el momento, la alcaldía de la capital tachirense conoce la iniciativa de la Escuela.

Para este 2021 mantienen los módulos introductorio, intermedio, avanzado y una oferta (paga) para asesoría y capacitación ante empresas, organismos e instituciones.

La Escuela de Reciclaje no se limita a dar formación y asesoría en el estado Táchira. Tienen dispuesto un equipo de ingenieros y especialistas en el país, que pueden desplegarse de acuerdo a las necesidades de cada municipio que así lo requiera.

 

 

 

 

 

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