Eladio Muchacho Unda
Conocí a Antonio Perdomo cuando era un chamo y con un grupo de jóvenes estaban fundando el Centro de Animación Juvenil con orientación salesiana. Eso hace alrededor de 47 años. La fundación del CAJ fue en el año 1977, un año antes de la fundación de Diario de Los Andes. Dos instituciones hermanas que hicieron del servicio su razón de ser: nacieron para servir.
Antonio fue un Ser de Luz, fundador y luego mentor del Centro de Animación Juvenil, su generosa entrega al servicio de la gente lo convirtió en un gran líder social, un ejemplar líder servidor. Es invalorable el legado que nos deja, especialmente hoy cuando lo que Venezuela necesita son los valores que Antonio desplegaba amorosamente como Ciudadano, Esposo, Padre, Amigo y Maestro.
En la madrugada de hoy 3 de diciembre, cuando Francisco, actual presidente del CAJ. me llamó para entre lágrimas decirme que Antonio se acababa de ir, le pregunté con mucho coraje a Dios ¿,Por qué, Padre, si lo necesitamos tanto? Al ratico recibí una nota de Morelia Valero: «Hoy comprendo porqué Jesús resucitó a su amigo Lázaro, no aguanto la tristeza de su partida.»
Leonardo Boff se refiere a la muerte como un «paso alquímico»:
«… el paso alquímico de este lado de la vida hacia el otro». Ahí, espero, todo quedará claro y nos sorprenderemos, porque todos estamos umbilicalmente interrelacionados, formando la inmensa cadena de los seres y el tejido de la Vida. .Caeremos, así lo creo, en los brazos de un Dios-Padre-y-Madre, de infinita misericordia para quien la necesita por causa de sus maldades, y en un abrazo amoroso eterno para los que se orientaron por el bien y por el amor…» ( El misterioso destino de cada uno / Leonardo Boff).
Hoy Dios, cuando amanecía el 3 de diciembre de 2023, recibió a Antonio con un abrazo amoroso eterno, que me permite afirmar que entre Dios y Antonio ahora sobra la y.
EMU
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