SAN CRISTÓBAL. Un hombre que con arma de fuego se enfrentó a una comisión mixta de Conas y Cicpc, en una de las trochas que en Ureña conduce a territorio colombiano, fue dado de baja, según lo manifestaron funcionarios policiales que se encargan de las investigaciones y tratan de establecer si el fallecido estaba vinculado a grupos irregulares y de contrabandistas.
Los hechos tuvieron como escenario la trocha conocida como “La Mona”, utilizada por personas al margen de la ley, en momentos que los funcionarios desarrollaban investigaciones relacionas con varios casos de homicidio ocurridos en la zona de frontera y que son atribuidos a grupos irregulares, particularmente a paramilitares que mantienen enfrentamiento con sus rivales, por cuestiones de tipo territorial.
El sujeto, que no ha sido identificado por cuanto carecía de documentos, transitaba por la trocha e intento evadir a la comisión retornando a territorio colombiano. Saco a relucir un arma de fuego que acciono contra los funcionarios, dando lugar a un intercambio de disparos, durante el cual resulto herido y fallece mientras era trasladado al CDI de Ureña.
Efectivos de la División Contra Homicidios del Cicpc sub delegación Ureña, procedieron al levantamiento del cadáver que fue trasladado a la morgue del Hospital Central, donde permanece como “desconocido”, en espera de una identificación. En poder del abatido se encontró un arma de fuego, concretamente un revolver calibre 38, cañón corto y dos teléfonos celulares.
Cadáver en descomposición
De igual manera voceros policiales informaron sobre un segundo p0rocedimiento ocurrido en la zona de frontera, concretamente en la zona de Llano Jorge, en San Antonio del Táchira, municipio Bolívar, donde en horas de la mañana de este miércoles fue encontrado el cadáver en estado de descomposición de un hombre, de momento no identificado.
Detectives del Cicpc acudieron al lugar para las investigaciones, tras ser informados que, en zona boscosa, cerca de la entrada a la hacienda La Ponderosa, fueron encontrados los restos de una persona, que, según los expertos, pudiera tener una data de muerte estimada en dos meses.
La comisión detectivesca que hizo el levantamiento se encargó de su traslado a la morgue del Cementerio Municipal de San Cristóbal, para los estudios de tipo forense que permita establecer la fecha exacta y las causas de muerte. Se especula que presentaba impactos de bala.