Mientras ciudadanos permanecen en casa acatando la cuarentena social, establecida para evitar la propagación del coronavirus en Venezuela, algunos servicios públicos parecen andar de parranda, pues si bien es cierto, los cortes eléctricos disminuyeron por unos días, este martes 24 de marzo, ha regresado la inestabilidad eléctrica.
Varios bajones y cortes eléctricos, así como las constantes fallas de agua, sufren especialmente en los municipios Libertador, Campo Elías y Alberto Adriani, según reportan usuarios en las redes sociales y grupos de WhatsApp, convirtiendo a los electrodomésticos en símbolos de resistencia.
El servicio de agua potable es, en serio, preocupante. Cortes con más de 12 horas sin servicio, cuando entre las principales recomendaciones para contrarrestar el avance del covid 19, es precisamente lavarse las manos constantemente y extremar cuidados de higiene, siendo por demás bastante difícil de cumplir sin el preciado líquido. No hay pronunciamientos, ni cronogramas oficiales, salvo reconocer la fuerte sequía de los últimos meses, dejando claro, no existen, hasta el momento, alternativas para solucionar la falta de agua potable.
Servicios de telecomunicación e internet presentan largos periodos de inexistencia, tanto en telefonía fija estatal, como privados.
Situación que desespera a quienes dependen de ellas para laborar o cerrar ventas. Como si fuese poco, en medio de la cuarentena social, muchas personas usan las redes sociales como única diversión y sin responsabilidad, compartiendo gran cantidad de información falsa, saturando equipos y la poca conectividad existente, empeorando hasta el, ya malo, tradicional servicio de llamadas, conversando en alto porcentaje de tiempo solos con el equipo, pues red “no hay”
Como si fuese poco, gas doméstico tampoco hay
Las amas de casa en medio de la cuarentena deben recurrir a fogones de leña, bastante dañinos para las vías respiratorias, o preparar alimentos, lo más rápido posible, en cocinas eléctricas, temerosas de quedarse a medio camino si falla el fluido eléctrico, o con la esperanza de terminar la comida cuando llegue la luz.