Luis “El Teacher” Cárdenas.- Luego de unas declaraciones difundidas por el presidente de Boca Juniors, Jorge Amor Ameal, donde expresa el deseo de que su segundo vicepresidente y leyenda del club, Juan Román Riquelme tenga una despedida oficial en la cancha, ha despertado la ilusión de la afición xeneize, que sigue idolatrando al ‘10’ que grandes noches de fútbol les regaló.
“Lo veo y le digo qué bien que estás, estás para jugar. Se agarra la cabeza. Ojalá sea por los puntos. Es una decisión de él. Necesitaríamos siete u ocho Bomboneras. Si hablan de (Juan Sebastián) Verón en Estudiantes, ¿cómo se va a poder hablar de Román? Ojalá pudiera jugar, la gente se muere por eso. Si quiere hacer una despedida, le dije que va a tener que ir a todas las provincias”, declaró el dirigente a la radio La Red, manifestando su deseo de verlo de nuevo en corto al ex volante de la albiceleste.
Juan Román Riquelme tiene 42 años y no juega desde hace casi seis, cuando decidió colgar los botines en diciembre del 2014 vistiendo los colores de Argentinos Juniors. Inició su carrera profesional en Boca Juniors en 1996 y estuvo en el equipo hasta el 2002, cuando fue fichado por el FC Barcelona, donde solo pudo estar una campaña, sin poder mostrar su potencial.
De ahí se fue al Villarreal, donde logró vivir sus mejore momentos en Europa, para luego regresar al club de sus amores.
Se retiró con 673 partidos disputados entre clubes (591) y selección (82, de ellos 51 con la absoluta), marcando 175 goles y dando un total de 256 asistencias, ganando en su carrera 16 títulos, de ellos cinco ligas, una Copa de Argentina, tres Copas Libertadores, una Recopa Sudamericana y una Copa Intercontinental (hoy Mundial de Clubes) con Boca, dos Intertoto (previa de la extinta Copa Uefa) con el submarino amarillo español y cuatro títulos con la selección albiceleste, entre ellos la medalla de oro en las Olimpiadas de Pekin 2008.
Aunque hay diversas opiniones sobre su vuelta, algunos escépticos que cuestionan que su legado se puede ver “manchado” por lo que pueda pasar en su regreso, la mayoría se ilusiona y mucho con verlo al menos en un partido o jugando aunque sea 20 minutos y que su magia siga intacta, aún cuando a los 42 años no tenga las mismas condiciones físicas del pasado.