“… el fundamento verdadero de la felicidad: la Educación”
(Simón Bolívar. 1825)
El presente ensayo descriptivo, en honor al Dr. José Gregorio Hernández Cisneros (1864-1919), con motivo de su próxima Canonización, el 19 de octubre de 2025; muestra en orden secuencial al estudiante y profesor universitario; fundado en las referencias bibliográficas. Comprende los estudios realizados, su desempeño docente y profesional, mención concreta de su obra científica y literaria; indicando las interrupciones en los años: 1908 (la Cartuja de Lucca, Italia); 1913 (Colegio Pio Latino Americano, Roma, Italia), y 1917 (viaje de estudios a Estados Unidos y Europa). Se advierte, que no se abunda en su vocación y actividad religiosa, por cuanto no corresponde al objetivo de este trabajo.
El marco político del país, durante la existencia vital de José Gregorio Hernández, fue así: el 24 de abril de 1863, se firmó, el Tratado De Coche, que puso fin a la Guerra Federal. Al año siguiente, el 25 de octubre de 1864, nació José Gregorio Hernández, en la parroquia Libertad, del Departamento Betijoque, Estado Trujillo, Estados Unidos de Venezuela. Sus padres: Benigno Hernández Manzaneda y Josefa Antonia Cisneros Mansilla. Se encontraba vigente, la Constitución de 1864, sancionada en Caracas por la Asamblea Constituyente el 28 de marzo de 1864, promulgada en Santa Ana de Coro, por el Presidente Juan Crisóstomo Falcón, el 13 de abril del mismo año. Los Presidentes que gobernaron el país durante ese lapso fueron: Juan Crisóstomo Falcón (1863-1868); Guillermo Tell Villegas (1868-1869); José Ruperto Monagas (1869-1870); Antonio Guzmán Blanco (1870-1877); Francisco Linares
Alcántara (1877-1878); Jacinto Gutiérrez y Martínez (1878-1879); Antonio Guzmán Blanco (1879- 1884); Joaquín Crespo (1884-1886); Antonio Guzmán Blanco (1886-1888); Juan Pablo Rojas Paul (1888-1890); Raimundo Andueza Palacio (1890-1892); Joaquín Crespo (1892-1898); Ignacio Andrade (1898 -1899); Cipriano Castro (1899-1909); Juan Vicente Gómez (1909-1935).
I.- EL COLEGIO VILLEGAS
José Gregorio Hernández, cuando niño, recibió formación e instrucción básica por parte de sus padres en su pueblo natal Isnotú, Estado Trujillo. A los nueve años, fue inscrito en la única escuela privada del lugar a cargo de su primer maestro Pedro Celestino Sánchez, educador nativo de Maracaibo y Guardiamarina retirado de la Marina de Guerra. A los 13 años, fue enviado por su padre, a continuar los estudios en Caracas, en el Colegio Villegas.
El joven José Gregorio, al amanecer del 6 de febrero de 1878; en Isnotú, se despidió de su familia; salió acompañado de dos amigos de su padre, el senador José de Jesús Romero y el diputado Francisco Vásquez, miembros del Congreso, que se había instalado el 20 de febrero de 1877, ambos en representación del Estado Táchira. El destino era el Colegio Villegas, ubicado en la calle Oeste 1, entre las esquinas de San Mauricio (hoy Santa Capilla) y Veroes, en la ciudad de Caracas, actual sede de la Escuela Superior de Música José Ángel Lamas; esta ubicación la proporciona el Dr. Virgilio Tosta en su trabajo “Vida y Obra del Dr. Guillermo Tell Villegas”. El colegio, fue fundado el 1 de enero de 1876, bajo la dirección del ilustre ciudadano Guillermo Tell Villegas, Doctor en Derecho Civil, egresado de la Universidad Central de Venezuela, el 5 de septiembre de 1852, político, educador y escritor, hombre de abundante y brillante trayectoria pública. En tiempos de la Guerra Federal, se desempeñó como Gobernador de Cojedes en 1859, Barinas en 1859 y Trujillo en 1863; miembro de la Alta Corte Federal, Presidente de la Cámara de Diputados del Congreso, Ministro de Relaciones Interiores, Ministro de Relaciones Exteriores y encargado en cuatro oportunidades de la Presidencia de la República (1868,1869, 1870, 1892).
En diciembre de ese año 1878, también viajaron desde el Estado Trujillo a Caracas, el niño de 9 años Juan de Dios Villegas Ruiz, nacido en Betijoque, el 8 de mayo de 1869; acompañado de sus padres Elisa Marina Ruiz y Antonio Villegas, quien era hermano de Guillermo Tell Villegas, según refiere el mismo Dr. Juan de Dios Villegas Ruiz, en su Elogio del Dr. José Gregorio Hernández, pronunciado cuando se desempeñaba como Segundo Vicepresidente de la Academia Nacional de Medicina, el 20 de noviembre de 1919. Ambos niños, nacidos en poblados colindantes y cercanos, de familias amigas: Juan de Dios, del Departamento de Betijoque y José Gregorio, de una de sus parroquias: Libertad (Isnotú); unidas en aquel tiempo por pequeños caseríos. Siempre existió coincidencia de José Gregorio y Juan de Dios: en el escenario educativo y profesional: en año de su ingreso al Colegio Villegas y finalización del curso preparatorio; obtención de los grados de Bachiller en Filosofía y Ciencias Médicas; en el egreso de la UCV como Doctores en Ciencias Médicas; estudios de postgrado en Francia; ambos fueron miembros fundadores del Colegio de Médicos, instalado el 5 de julio de 1902 en el salón de sesiones de la Academia Nacional de la Historia; los dos, fueron miembros fundadores de la Academia Nacional de Medicina, creada por ley de fecha 7 de abril de 1904, e instalada el 11 de julio de 1904 en el Salón Rectoral de la Universidad Central, en la cual fue nombrado Subsecretario, el Dr. Juan De Dios Villegas Ruiz.
José Gregorio, permaneció interno en el Colegio Villegas, desde el año 1878 hasta 1882, bajo la dirección y excelente tutela de su gran maestro Dr. Guillermo Tell Villegas, y el cuidado de su esposa doña Pepita Perozo de Villegas. Allí realizó los cursos Preparatorio y Filosófico, necesarios para optar en la universidad, al grado de Bachiller en Filosofía. A los alumnos egresados de afamados y acreditados colegios de la época, en Caracas e interior del país, les otorgaban la opción de presentar examen en la universidad ante un jurado,para optar al citado grado de bachiller. Entre otros el colegio Villegas (Guillermo Tell Villegas); Santa María (Agustín Aveledo); Venezuela (Jesús Muñoz Tébar); Roscio (Manuel Antonio Carreño); Sucre (Jesús María Sifontes).
Señala el Dr. Virgilio Tosta, en su obra Vida y Obra del Doctor Guillermo Tell, que las materias cursadas por José Gregorio en el Colegio Villegas, fueron: primeras letras, latinidad, gramática castellana, religión, urbanidad, francés, inglés, teneduría de libros, taquigrafía, filosofía intelectual, matemáticas, geografía, historia universal, cosmografía y música. Una apreciación del nivel académico del colegio Villegas, se demuestra en el acta de fecha 14 de mayo de 1882, donde se constituyó la Junta Examinadora de Historia Universal, a los fines de evaluar a los alumnos que egresarían ese año del Colegio. Los alumnos presentes, eran: José Benito Alvisua, José P. Alfonzo, Reinaldo Ackers, Carlos A. Bermúdez, Alberto Couturier, José Gregorio Hernández, Luis F. López, Francisco de Paula Orta, José M de los Ríos Llamozas, Carmelo Rojas, Rosalío Rodríguez, Rafael A. Sutil, y Juan de Dios Villegas. La Junta Examinadora, estaba integrada por: el Director del Instituto, Dr. Guillermo Tell Villegas, antes identificado; el General de Ingenieros Juan José Aguerrevere, primer Presidente del Colegio de Ingenieros y constructor de la carretera Caracas- La Guaira, inaugurada el 14 de enero de 1845; el Dr. José D. Montero y el Bachiller Andrés Vizcarrondo Rojas. Los alumnos examinados, resultaron aprobados. Tres de ellos: Alberto Couturier, José M. De Los Ríos Llamozas y Juan de Dios Villegas Ruiz, fueron compañeros de curso de José Gregorio en la UCV, egresando los cuatro en 1888, como Doctores en Ciencias Médicas. Su compañero Dr. Juan de Dios Villegas, al recordar aquellos tiempos del Colegio Villegas, refiriéndose a su amigo y paisano José Gregorio, en su “Elogio del Dr. José Gregorio Hernández” de 1919, en la Academia Nacional de
Medicina, expresó:
“ Mi admiración más respetuosa…ante el recuerdo querido del respetado compañero, en quien yo me acostumbre a ver siempre como a un ser muy superior, ya en nuestra vida de colegiales, en los claustros del renombrado instituto de mi ilustre tío y uno de mis inolvidables bienhechores , el Dr. Guillermo Tell Villegas; o en las aulas universitarias , en donde juntos cursamos la Medicina; o en las clínicas y nosocomios y laboratorios europeos; o en las diarias luchas de nuestra amada profesión, que tanto supo él enaltecerla”.
“Mi llegada en 1878, de nueve años de edad, a esta noble, generosa y hospitalaria Caracas… ¡Aquí conocí yo a Hernández, en diciembre de aquel año! … ¡Y cuántas cosas, sorprendentes, iba yo casi a diario descubriendo y edificado admirando en tan insigne compañero, providencialmente encontrado por mí, en el Colegio, como un modelo a la verdad muy difícil de imitar, de moral y de virtud, y de estricto e inflexible cumplimiento del deber! … y qué temple el de su carácter desde niño! …Y como se agigantó ese carácter cuando hombre… El Dr. Hernández parecía que obraba a impulsos de un poder oculto, de una fuerza de reserva que secretamente y por su sola presencia se hacía sentir; sus medios de acción fueron única y exclusivamente sus virtudes; e incuestionablemente que él era de esa clase rarísima de hombres que obran sobre los demás por medio de una fuerza que se impone fatalmente y cuya imposición nos hace soportarla, ¡porque ella deriva única y exclusivamente de la virtud!”.
“Yo jamás lo vi tomar parte en nuestros juegos y travesuras infantiles, sus recreaciones favoritas consistían en el estudio del piano, instrumento éste que él llegó casi a dominarlo con un arte y gusto exquisitos, y en su intimidad con autores muy dilectos; en ocasiones vi a Plutarco y a Kempis y distintos volúmenes de ‘la vida de los Santos’ en sus manos”.
El alumno José Gregorio, durante su permanencia en el Colegio Villegas, se desempeñó como vigilante en la observancia de la disciplina y buen orden de los alumnos dentro del recinto; también trabajó como catedrático de aritmética en una de las secciones escolares, cuando era alumno del Colegio. Al comenzar los estudios universitarios continuó como profesor del Colegio y permaneció viviendo en el mismo.
II.- UNIVERSIDAD CENTRAL DE VENEZUELA (UCV)
La UCV, tuvo su origen en la Real Universidad de Caracas, fundada por el Rey Felipe V, mediante Real Cédula fechada en Lerma, el 22 de diciembre de 1721. El Papa Inocencio XIII, le otorgó el carácter de Pontificia; encontrándose así, bajo la tutela y protección del Monarca y del Sumo Pontífice. La Real y Pontificia Universidad de Caracas, quedó definitivamente instalada el 9 de agosto de 1725, en la sede del Seminario de Santa Rosa, al lado del Palacio Arzobispal, frente a la Plaza Mayor, actual sede del Concejo Municipal de Caracas. Por la Ley de Estudios de la Gran Colombia, del 18 de marzo de 1826, la Universidad deja de ser Real y Pontificia y se convierte en Universidad Central de Venezuela.
Simón Bolívar, asesorado por los doctores José María Vargas (médico) y José Rafael Revenga (abogado y Secretario General del Libertador), el 22 de enero de 1827, decreta la modificación de los antiguos estatutos que regían la Universidad de Caracas; anulando la prohibición existente, que los doctores en medicina no podían ser Rectores de la Universidad, igualmente la disposición que los rectores deberían alternarse entre un rector secular y otro eclesiástico.
El 24 de junio de 1827, el Libertador, desde su Cuartel General en Caracas, y en ejecución de la Ley de 1826, decreta el Reglamento o Estatutos de la Universidad Central, constante de 289 artículos. De acuerdo al artículo 61 del decreto, las Cátedras de la Universidad serían: dos cátedras de Gramática Latina, una de Literatura, una de Ideología y Metafísica, Gramática General, Lógica, Física General y Particular; otra de Matemática, Geografía y Cronología; una de Ética y Derecho Natural; cuatro de Medicina, cuatro de Jurisprudencia Civil y cuatro de Ciencias Exactas. De conformidad con el artículo 83, las clases de Medicina, se dividieron en el siguiente orden: 1°, una de Anatomía General y Descriptiva; 2°, una de Fisiología e Higiene; 3°, una de Nosografía y Patología Interna y Medicina Práctica; 4°, una de Nosografía y Patología Externa o Cirugía; 5°, una de Terapéutica, Materia Médica y Farmacia; 6°, una de Obstetricia y Partos; 7°, una de Medicina Legal. Además, habrá clases de Clínica Médica y Quirúrgica, que darán en los hospitales sus respectivos profesores.
Los Estatutos universitarios, eliminaron el cargo de Cancelario, que ejercía el Canónigo Maestrescuela de la Catedral, con el fin de disminuir la influencia de la Iglesia en la Universidad; la cual continuó funcionando en el Seminario Santa Rosa, hasta el año 1856, cuando fue trasladada al viejo edificio que había ocupado el Convento de San Francisco, ubicado entre las esquinas de Bolsa a San Francisco, al lado del Capitolio Federal. Durante el Gobierno de Guzmán Blanco, entre 1873-1875, el arquitecto Juan Hurtado Manrique, proyecta y construye la fachada norte de la Universidad Central, al estilo gótico.
A.- Grado de Bachiller en Filosofía
En fecha 19 de mayo de 1882, cinco días después de su egreso del Colegio Villegas, donde realizó el curso Preparatorio y Filosófico; José Gregorio presentó ante el Presidente y Vocales de la Junta Inspectora de la ilustre Universidad Central, una solicitud escrita para obtener el grado de Bachiller en Filosofía, acompañando los documentos probatorios de haber realizado todos los estudios necesarios en el Colegio Villegas.
El día 22 de mayo, canceló doscientos (200) bolívares, por concepto de derechos para obtener dicho título. En la misma fecha, José Gregorio presentó al Rector de la universidad un escrito, renunciando a los derechos que pudieran concederle para su incorporación en el concurso y al término del edicto; solicitando adicionalmente que su solicitud fuese tramitada con urgencia, alegando: “ … deseo aprovechar el próximo vapor que toca en
Curazao, procedente de La Guaira para regresar vía de Maracaibo, al seno de mi familia, que reside en Trujillo, en unión de los diputados que tienen encargo de mi padre para llevarme”.
La solicitud fue admitida por la Junta Inspectora mediante auto firmado por el Rector de la universidad Ángel E. Rivas Baldwin y su Secretario C. Rodríguez, en fecha 23 de mayo de 1882. En la misma fecha, mediante nota separada, tomando en consideración la solicitud, se ordenó fijar el edicto y celebrar al día siguiente el acto para establecer “los puntos” del examen.
El 24 de mayo, en presencia del Rector; José Gregorio, extrajo a la suerte de una urna, las “cuestiones” o temas, sobre los cuales se llevaría a cabo el examen oral y público. Los temas para el examen fueron: 1.-Teoría del condensador eléctrico 2.-Máquinas de vapor.
El día 25 de mayo, se efectuó el examen previsto en presencia del Rector, ante un jurado compuesto por los doctores: Nicanor Borges, Maestro en Filosofía y Doctor en Derecho Civil; Manuel María Urbaneja, Ingeniero graduado en la primera promoción de la Academia de Matemáticas y Doctor en Derecho Civil; Agustín Aveledo, Ingeniero egresado de la Academia de Matemáticas y Doctor en Filosofía, primer director de la Escuela de Ingeniería y Presidente del Colegio de Ingenieros en los periodos: 1869-1881, 1888-1895; y los Licenciados en Filosofía: Francisco de Paula Quintero y Miguel Páez Pumar, egresados de la UCV, como licenciados en Filosofía, el 30 de agosto de 1879. Aprobado el examen por unanimidad, el Rector en esa misma fecha, confirió a José Gregorio Hernández el grado de Bachiller en Filosofía.
B.- Ingreso a la Facultad de Medicina UCV
José Gregorio, ingresó a la UCV el 1° septiembre de 1882, donde obtuvo el Grado de Bachiller en Ciencias Médicas el 19 de junio de 1888, y el Grado de Doctor en la misma especialidad el 29 de junio de 1888, cuando se desempeñaba como Rector de la universidad el distinguido Doctor en Jurisprudencia, periodista y escritor Aníbal Dominici.
Señala el Dr. Ricardo Archila en su obra “Luis Razetti o Biografía de la Superación”, que: “En la facultad de Medicina, regía para la época el sistema de que el alumno, al finalizar los tres bienios, presentara dos exámenes particulares: uno de Bachiller en Medicina y otro de Doctor”. Anota el Dr. Archila, que el pénsum de estudios fundamentales, era para los seis años, el siguiente: Anatomía, primero y segundo año; Higiene, primer año; Fisiología, segundo año; Patología, tercero y cuarto año; Cirugía, tercero y cuarto año; Medicina Operatoria, tercer año; Obstetricia, quinto y sexto año; Química, quinto y sexto año; Terapéutica, quinto año; Medicina Legal, sexto año.
En cuanto a los estudios de medicina, el Dr. Ildefonso Leal, en su libro Historia de la UCV, señala que, en 1874, tuvo lugar una reforma en la universidad; y la Facultad de Ciencias Médicas desde ese año hasta el año de 1883, tuvo las siguientes cátedras: Anatomía General y Descriptiva; Higiene Pública y Privada; Fisiología; Patología General; Medicina Operatoria; Cirugía, Patología Interna; Obstetricia; Química; Terapéutica y Materia Médica; Medicina Legal. Agrega Leal, que, en 1883, entró en vigencia la nueva estructura de las cátedras universitarias; y que al finalizar el periodo guzmancista en 1888, la universidad contaba con 29 cátedras concurridas por 800 estudiantes. Las cátedras correspondientes a la Facultad de Ciencias Médicas, eran con sus correspondientes profesores las siguientes: Anatomía: Alejandro Frías Sucre; Cirugía: Guillermo Morales; Higiene y Fisiología: David Lobo; Patología: Bernardino Mosquera; Medicina Operatoria: Federico Tejera; Terapéutica y Materia Médica: Elías Rodríguez; Química: Adolfo Fridensberg.
Señala el Dr. Leal, que el estudio de los idiomas. Latín, griego, inglés, francés y alemán, así como la Historia Universal, eran obligatorios desde 1874, para obtener los grados de Licenciado y Doctor en las diferentes carreras. En 1877 fue suspendido parcialmente dicho requisito, obligándose a los estudiantes a aprobar un solo idioma “vivo”. En 1879, Guzmán Blanco volvió a implantar la obligación de aprobar todos los idiomas. Para el año 1888, año de graduación de José Gregorio, las materias obligatorias de idiomas e historia universal, tenían los siguientes profesores: Francés: Juan Bautista Calcaño y Paniza; inglés: Nicolás Veloz Goiticoa; Alemán: Adolfo Ernst; Historia Universal: Ezequiel María González. En 1897, Joaquín Crespo, trasladó las cátedras de
idiomas a la Escuela Politécnica.
Al comenzar el segundo año de carrera, José Gregorio se mudó a una pensión, con sus hermanos César y Benjamín, quienes vinieron a Caracas a estudiar comercio. El inmueble estaba ubicado en la casa N° 3, entre las esquinas de Madrices a Ibarras; una pensión, regentada por sus dueños, los esposos Puyou Patri. Allí, cuando José Gregorio cursaba el tercer año, sufrió de fiebre tifoidea, pasando por un estado de salud tan grave que el Pbro. Dr. Juan Bautista Castro, su guía espiritual, le administró los santos sacramentos. Tres médicos eminentes lo trataron, los doctores: José Manuel de los Ríos (padre), Antonio José Villegas y Guillermo Morales. Sus compañeros ucevistas en grupos de cuatro, se alternaban su cuidado diario. Providencialmente se recuperó y se reincorporó a sus estudios universitarios. Durante la carrera conoció a un joven estudiante que se convirtió en su mejor amigo: Santos Aníbal Dominici, egresado de Doctor en Ciencias Médicas en 1890; hijo del Dr. Aníbal Dominici, Doctor en Derecho Civil, egresado de la UCV el 24 de julio de 1859 y jefe de una ejemplar familia caraqueña, que José Gregorio visitaba todos los domingos, en el seno de la cual, era considerado como un hijo, junto a Pedro César y sus hermanas; allí, aprovechaba de consultar la magnífica biblioteca del Dr. Dominici, quien adquiría en el exterior para su hijo y José Gregorio, las últimas obras médicas publicadas.
Continúa.